Por eso, no busques tu trabajo ideal, sino una empresa de sueño. Un lugar que te reconozca como algo más que un mero empleado. Que sepa que estás comprometido con tu vida familiar, con tus amigos, tu religión… Algo que te permite hacer tu trabajo mejor. “Todos los resultados que se pueden esperar de un empleado son la productividad, la satisfacción en el trabajo, la reducción de niveles de estrés, la intención de permanecer en la organización… Algo que se asocia a las empresas de sueño”, dice Lucy English, psicóloga y directora de la investigación institucional en Horizons Workforce Consulting de Massachusetts.
English llevó a cabo una estudio en el que encuestó a más de 4.000 empleados en jornada completa. Descubrió que las personas que trabajan en una compañía de sueño están mejor que aquellas que tienen el trabajo de sus sueños. Son más saludables, más propensas a decir que disfrutan de su trabajo y se sienten inspiradas.
“Se trata de volver al hecho de que toda nuestra vida no es un trabajo. Si nos fijamos en un modelo de bienestar de los empleados, la satisfacción con las actividades específicas de trabajo representan una cuarta parte de eso. Una empresa que te apoya como persona, abarca todas las otras cosas que hacen la vida agradable”, explica English.
Según la psicóloga, los empleados asocian las siguientes tres cualidades a una empresa de sueño:
• La preocupación por el bienestar de los empleados
• Proporcionar oportunidades para aprender y crecer en una carrera
• Balance de oferta de trabajo-vida
Por eso, para buscar empleo, hay que dejar de imaginar un trabajo ideal y encontrar una empresa de sueño. Así encontrarás la felicidad en el trabajo.