Las joyas de la familia Vanderbilt resultaron irresistibles en la subasta Phillips Geneva Jewels Auction: V. La pieza más cotizada fue «El Zafiro Vanderbilt», un broche de diamantes de la Belle Époque con un zafiro de Cachemira de 42,68 quilates en el codiciado color «azul real». Se vendió por más de 3,5 millones de dólares.
Según la casa de subastas, la gema, montada por Tiffany & Co., fue un regalo original de Alice Gwynne Vanderbilt a su hija Gladys Vanderbilt, condesa Széchényi. El intrincado diseño calado del broche está adornado con diamantes de talla antigua.
El zafiro formaba parte de los 12 lotes atribuidos al patrimonio de Gladys Moore Vanderbilt. El conjunto de joyas y otros objetos preciosos se vendió en su totalidad, alcanzando más de 4,2 millones de dólares y superando las estimaciones, según la casa de subastas.
Otra pieza destacada de la colección Vanderbilt fue un broche de diamantes que originalmente formaba parte de una tiara de diamantes creada por Cartier durante la Belle Époque, alrededor de 1908. Encargada por Alice Vanderbilt para la boda de su hija con el conde László Széchényi en 1908, la tiara fue posteriormente desmontada, y el broche actual, con un diamante de talla antigua en forma de pera de 4,55 quilates, alcanzó más de 560.000 dólares, más del triple de su estimación más alta. Se situó en el sexto puesto de los lotes más vendidos de la subasta.
Celebrada en el Hôtel Président, la subasta de Phillips recaudó más de 17 millones de dólares, con 96 de los 114 lotes vendidos (85%) y alrededor del 90% vendido por valor. Las ventas de joyas firmadas fueron especialmente fuertes, con el 90% de esos lotes vendidos y «la mayoría superando con creces sus estimaciones máximas previas a la venta», según la casa de subastas.
«Se alcanzaron precios notables por diseños icónicos de las principales maisons, incluidas las joyas «Panthère» de Cartier y el cinturón «Serpenti» de Bulgari, todos ellos superando sus estimaciones más altas», afirmó Benoît Repellin, director mundial de Joyería de Phillips, en un comunicado.
Los zafiros y los diamantes también obtuvieron buenos resultados en la venta.
Sin embargo, el lote estrella original de la subasta, un anillo con un diamante de 6,95 quilates de color rosa púrpura intenso, con un valor estimado de aproximadamente nueve millones de dólares, fue retirado antes de su venta, según confirmó un portavoz de Phillips.
El segundo lote más cotizado fue un zafiro de Cachemira de 18,09 quilates sin tratar, con corte octogonal escalonado, descrito como «vívido» y de color «azul aterciopelado». Se vendió por más de 2,8 millones de dólares.
También obtuvo buenos resultados un diamante de talla antigua de color rosa pálido y marrón claro de 10,08 quilates, tipo IIa, procedente de Golconda, una de las fuentes de diamantes más antiguas y apreciadas del mundo, que se vendió por 880.915 dólares, muy por encima de su estimación más alta.
Otros lotes destacados fueron:
- Un par de pendientes de diamantes talla brillante, de 8 y 8,28 quilates, ambos de color D, claridad VVS1, con un pulido y una simetría excelentes, que alcanzaron un precio de 832.865 dólares.
- Un par de pendientes Graff con diamantes amarillos fancy de talla escalonada octogonal de 20,33 y 21,38 quilates, rodeados de diamantes talla baguette y brillante, que alcanzaron los 800.832 dólares, el doble de su estimación más alta.
- Un anillo con una turmalina Paraíba de Mozambique ovalada de 20,08 quilates rodeada de diamantes, que se vendió por 544.566 dólares, superando su estimación más alta.
- Un anillo con un diamante de talla brillante de 13,02 quilates, con los hombros engastados con diamantes de talla simple y rosa, que alcanzó los 464.483 dólares.
Completando los diez lotes más vendidos, se encontraban dos joyas firmadas por casas históricas:
- Un collar largo Art Déco de Van Cleef & Arpels de la década de 1920, con un diamante de talla escalonada de 10,79 quilates, que se vendió por 416.433 dólares.
Un cinturón «Serpenti» de Bulgari, con un cuerpo articulado con esmalte blanco y ojos de esmeralda en forma de pera, que se vendió por 368.383 dólares.
