La felicidad no es algo que aparezca de la noche a la mañana y cuando alguien no es feliz en su vida, probablemente tampoco lo será después de jubilarse. Generalmente, la felicidad de las personas no depende íntegramente de un trabajo, por lo tanto, tampoco depende del hecho de dejar de trabajar, es decir, de jubilarse.
Estudios realizados en la Universidad de Pennsylvania revelaron que no existe un elemento único y común en la búsqueda de la felicidad, sino cinco. Cinco elementos que juntos pueden llegar a generar una sensación general de satisfacción y paz interior.
Según el investigador principal, Martin Seligman, las claves que llevan a la auténtica felicidad son:
Las emociones positivas, es decir, la esperanza, el entusiasmo, la calidez… Todas ellas ayudan a mantener un espíritu alegre.
El compromiso, esto es, el hecho de estar involucrado en alguna actividad. La jubilación en este aspecto es muy positiva, ya que dota a las personas de una cantidad mayor de tiempo libre para realizar actividades de su agrado.
Las relaciones, bien sean con amigos, familia o conocidos, son esenciales para ser feliz. Recuerda cuidar la relación con los que te rodean para que cuando te jubiles y de verdad tengas tiempo para dedicárselo, sigan ahí contigo.
El significado de la vida, tener un porqué. Lo recomendable es tenerlo mucho antes de jubilarse, de esta manera será más sencillo enfocar tus metas y decidir qué hacer cuando tengas todo el tiempo del mundo al retirarte.
Los logros, ya que proporcionan una auto imagen de uno mismo muy positiva. No tienen por qué ser estrictamente laborales, pueden ser también proporcionados por otras actividades.
En definitiva, la felicidad no depende de la jubilación ni del hecho de dejar de trabajar, sino que hay que tener en cuenta estos cinco aspectos para alcanzarla y no descuidarlos a lo largo de nuestra vida.