1. Alta autoestima y relajación: son las dos claves para un perfecto desenvolvimiento con tus compañeros y jefes en el trabajo. Es normal que no seas sociable si tienes la autoestima por los suelos, por eso debes comenzar por reforzar esos dos ámbitos de ti mismo antes de comenzar a ser más sociable con los demás.
2. La importancia del “afterwork”. Si de verdad quieres estar integrado en tu trabajo, nada mejor que salir con tus compañeros cuando acabe vuestra jornada laboral. Tendrás la ocasión de conocerlos y que te conozcan mucho mejor.
3. Ofrécete a echar una mano siempre que estés disponible, sobre todo si quieres que cuando te haga falta a ti, alguien esté para ayudarte. No te cuesta nada ser amable y ayudar a alguien cuando está “perdido”.
4. No tengas miedo de expresar tu opinión, todo el mundo tiene una y todas son respetables. Debate, opina, critica… Está bien escuchar a los demás, pero mejor ser partícipe de las conversaciones que mero oyente desde “la grada”.
Ponte retos que te ayuden a superar la timidez, como hablar en público o hacerte cargo de un proyecto importante fuera de las paredes de tu oficina. Puede que al principio te resulte complicado, pero es buenísimo para ti.