Esa “palabreja” que hace apenas unos años hemos comenzado a escuchar en nuestro país, pero que nació en 1999 al otro lado del charco, en Nueva York. Bernie DeKoven inventó el término para describir el trabajo colaborativo a través de ordenadores y meses después se creó en Nueva York el primer espacio de coworking, 42 West 24, oficina que continúa ofreciendo sus servicios.
Pero… ¿qué es el coworking? Se trata de un espacio, una especie de oficina, que comparten profesionales tipo “freelance”, emprendedores y pymes de diferentes sectores para desarrollar sus proyectos profesionales de manera independiente, a la vez que fomentan proyectos conjuntos. El alquiler del espacio se paga entre sus componentes, aunque se pueden encontrar otras formas de financiación, como la venta de artículos.
Hemos hablado con los integrantes de uno de estos espacios, se llama “Teta&Teta” y está en Madrid. Ellos lo definen como “un pequeño estudio compartido por profesionales independientes que eligieron un oficio demasiado bonito como para trabajar solo y en pijama.”Su creadora es María Rufilanchas, que nos ha explicado cómo surgió todo:
Fundé este espacio en marzo de 2013. Me costó mucho encontrarlo, busqué muchísimo. Había sitios que estaban bien, que tenían cierta magia… pero cuando encontré éste me enamoró. Me pilló en una época en la que estaba bien de dinero y me lié la manta a la cabeza. Y la verdad es que todo fue coser y cantar.
En él trabajan perfiles variopintos, pero todos ligados a la creatividad. Creatividad que fluye y se desborda por las largas mesas de trabajo, que asoma entre los Mac y se cuela entre las incesantes sacudidas de los teléfonos sonando.
Pedro Perles, ilustrador, es uno de los integrantes de este espacio y cree que el coworking es la manera actual más efectiva de establecer relaciones entre diferentes profesionales. Además -añade- puedes “rajar” de tu jefe, porque…no está, claro.
Pero… ¿qué ventajas tiene para profesionales freelance trabajar así en vez de en casa? (que les saldría gratis, claro). Sencillamente: infinitas. Se crean sinergias entre los distintos componentes, se dice adiós a la desgana, se hacen nuevos contactos… además de ser mucho más apetecible que hacerlo solo y metido en casa.
He pasado mucho tiempo trabajando desde casa y es claustrofóbico. Te encierras en ti mismo, en tu trabajo, no desconectas nunca… No llegas a saber dónde se separan tu vida y tu trabajo, asegura Miki Naranjo, diseñador gráfico y parte de Teta&Teta.
El coworking es algo del presente, cada vez son más profesionales los que se animan a trabajar de ésta forma. Pero formará parte del futuro y es probable que estos espacios crezcan en los próximos años.
Creo que estos espacios irán creciendo, dado que el número de trabajadores independientes de pequeñas empresas está aumentando cada vez más. Las empresas y las agencian demandan mucho este perfil profesional (freelance) en lugar de contratar a gente en plantilla, afirma Ales Santos, también diseñador gráfico.
Si eres trabajador freelance, autónomo… puedes comenzar a plantearte la opción de ser parte de uno de los cientos de espacios coworking que hay en nuestro país, en tu ciudad. Encontrarás la forma perfecta de darle un empujón a tu carrera y de salir del tedio que supone trabajar en casa.
Recuerda: elegiste “un oficio demasiado bonito como para trabajar solo y en pijama”.