1. Delegar. No cargues el peso del mundo sobre tus hombros porque es inviable que puedas sacar adelante tú solo toda la carga de trabajo. Pedir ayuda y delegar en los demás es la única forma de poder ser realmente productivo y de establecer buenas relaciones laborales.

2. Cuidado con la cafeína. El abuso de café o de otras bebidas con alto contenido de cafeína no mejoraran tu capacidad de concentración, todo lo contrario. Estas sustancias son estimulantes y disparan tus niveles de adrenalina a cotas poco saludables. Cuídate.

3. Positividad. Tu estado de ánimo depende, única y exclusivamente, de ti mismo así que afronta las cosas con optimismo y deja de ver el vaso medio vacío. Controla tus emociones.

4. Ver las cosas con perspectiva. Que no puedas controlar las situaciones no quiere decir que no puedas tener el poder de manejar cómo te enfrentas a ellas. Aléjate mentalmente del problema y trata de afrontarlo de forma objetiva y relajada.

5. Respirar. La mejor manera de controlar el estrés es a través de ejercicios de respiración profunda para que la sangre pueda fluir correctamente por tu organismo y pienses con mayor claridad. Relájate.

6. Valoran lo que tienen. Céntrate en las cosas positivas de tu vida y focalízate en ellas, tomar consciencia de que todo lo malo pasa te ayudará a tranquilizarte y a sentirte mejor.

7. Auto-motivación. Tu conciencia puede ser tu mejor o tu peor aliado así que piensa favorablemente sobre ti, apóyate y anímate a seguir adelante. Tienes la capacidad de controlar tus nervios si así lo deseas, no entres en círculos de negatividad.

8. Dormir las horas necesarias. El descanso es vital para la concentración y para que tu cuerpo pueda funcionar correctamente. No abuses alargando tus días de forma interminable porque al final acabarás teniendo consecuencias.

9. No te obsesiones con lo que no puedes cambiar. Plantearte todos los ‘¿y si..?’ posibles no te ayudará a dar con la solución a ningún problema, todo lo contrario, te mantendrá en tensión por cosas que son irreversibles. Mira hacia delante.

10. Tener tiempo para ti mismo. El trabajo no lo es todo en la vida así que piensa en ti mismo y en los tuyos y trata siempre de tener tiempo para dedicarlo a tu vida personal. Desconectar y relajarse es fundamental.