El principal problema que tenemos es cuando justo acabamos de tener el bebé, ya que ambos padres tienen que incorporarse al mundo laboral para poder mantener el ritmo económico del hogar, pero el bebé tiene numerosas necesidades que satisfacer. No obstante, nosotros te proponemos una serie de consejos para ayudarte en estos momentos tan complicados.

1. Pedir ayuda a la familia
Los familiares siempre son un buen reclamo, especialmente los abuelos del bebé, que siempre están dispuestos a ayudar y a colaborar en todo lo que se necesite. Sin embargo, no siempre vivimos cerca de nuestra familia o no pueden hacerse cargo de los hijos.

2. Establece horarios con tu pareja
Tienes que tener muy presente un dato importante: esto es tarea de los dos. Por ello, una buena solución puede ser alternarse las bajas para que siempre haya uno cuidando del pequeño de la casa. Así mientras tú estás de baja por maternidad, tu pareja puede seguir trabajando y contribuyendo económicamente a la familia, y viceversa. Además, ten en cuenta que en muchas ocasiones puedes unir tus bajas correspondientes por el bebé, con tus vacaciones, teniendo periodos más largos para dedicarte plenamente a tu hijo.

3. De full-time a part-time
Una de las alternativas más utilizadas hoy en día es la reducción de la jornada laboral a media jornada. De esta manera, podemos compaginar nuestro trabajo con el cuidado de nuestro hijo. De hecho, una publicación en el Journal of Family Psychology en 2011 aseguraba que “estas mujeres tienen menos sentimientos de depresión que las amas de casa y, a las vez, presentan menos conflictos relacionados con el trabajo que las que trabajan full time.”

4. Comienza a trabajar desde casa
Hoy en día ha aumentado considerablemente el numero de puestos que se pueden desempeñar desde el hogar. Y es que la mayoría de los trabajos que se realizan en una oficina no requieren nuestra presencia in situ. Si tu trabajo posee estas características, no te lo pienses dos veces: proponle a tu jefe poder trabajar desde tu casa temporalmente.

5. Contratar una niñera ‘au pair
Sin duda alguna, es una de las mejores soluciones cuando tus hijos son un poco más mayores. Estos programas proporcionan personas de otros países para trabajar temporalmente en tu casa. Ellos aprenden el idioma y ganan un dinero extra, mientras que tú les proporcionas a tus hijos la posibilidad de aprender otra lengua, a la vez que estar con gente más joven.