1. Te libera del estrés
Cuando lees dejas volar tu imaginación, y con ello te evades de tus problemas más terrenales. Durante un rato eres capaz de dejar a un lado el estrés y vivir una historia distinta a la tuya, de evadirte y no pensar en todo aquello que te preocupa.
2. Puede mejorar tus hábitos de sueño
Leer un rato antes de dormir es algo realmente recomendable, aunque intenta que no se trate de libros que te inquieten demasiado o que te hagan dar demasiadas vueltas a la cabeza. Leer en este momento del día puede mejorar tu descanso.
3. Mejora tu vocabulario
Si eres un lector asiduo sabrás que tu vocabulario nunca deja de crecer, que no dejas de aprender palabras nuevas, y con ello, que tu forma de hablar y explicarte se hace más amplia y rica.
4. No dejas de aprender cosas nuevas
Prácticamente cualquier libro te enseña algo que no sabías, te lleva a épocas que desconoces o te hace partícipe de historias que desconocías por completo. Aprenderás algo nuevo con cada obra.
5. Previene la degeneración cognitiva
Leer a menudo mejora tu memoria, tus capacidades mentales. Hay que recordar que el cerebro es un músculo, y que al leer (entre otras cosas) se ejercita. Hacerlo durante toda la vida previene una degeneración cognitiva temprana.