En la primavera de 2018, Bodega Contador estrenó Predicador tinto 2016, el famoso vino de cine de Benjamín Romeo. El tinto con el que la bodega llega a un público más numeroso es fiel reflejo de la filosofía con la que se elaboran todos los vinos en Contador: atención minuciosa al detalle en todas las etapas del proceso de producción con el máximo respeto al entorno, a la tierra, al viñedo, a la materia prima.
Compuesto por un 91% de Tempranillo, 3% de Garnacha, 3% de Graciano, 3% de Mazuelo, Predicador 2016 procede de 16 parcelas distintas, que aportan tanto complejidad como diversidad a este vino. El suelo, la tierra, la viña -que es la gran pasión del fundador de Contador, Benjamín Romeo- se trabajan siempre con laboreo manual; la tierra es abonada solo algunos años, siempre con materia orgánica elaborada por los propios viticultores de Bodega Contador a partir de estiércol de oveja. “Todo el trabajo en las viñas es orgánico, respetuoso y sincero”, señala Romeo.
Un trabajo que se hace con la mínima intervención, pero siempre vigilando que viña y uva estén en perfectas condiciones de salud. Las vides reciben únicamente los tratamientos imprescindibles con productos no residuales, para garantizar la sanidad del fruto. Predicador ha fermentado en depósitos de acero inoxidable pero también -como todos los vinos de Contador- en tintos de roble. Tras esto, ha vivido 17 meses de crianza en barrica 100% roble francés de uno y dos vinos –Benjamín Romeo selecciona personalmente las maderas para las barricas, entre las de más alta gama de las diez tonelerías más prestigiosas de Francia-.
Todo ello redunda un año más, siendo 13 las cosechas seguidas, en este Predicador tinto 2016 del que hay un total de 70.000 botellas concebidas a partir de una filosofía de bodega comprometida con la tierra y el medio ambiente a largo plazo.