1. Afecto y efecto: a simple vista, son dos palabras que pueden llevar a la confusión. Utiliza efecto cuando un hecho esté provocando que algo suceda. En cambio, afectar se refiere al impacto que puede provocar por ejemplo una bajada en bolsa. Es decir, las consecuencias. Afectar también refiere a los estados emocionales.
2. A ver y haber: “A ver” y “haber” tienen la misma pronunciación aunque, se deben hacer ciertas aclaraciones en cuanto a la escritura y su utilización. A ver se emplea cuando queremos comprobar algo, cuando algo genera interés o para llamar la atención seguido de una pregunta. En cambio, haber se usa como auxiliar delante de un participio o como sustantivo que, en general, significa ‘conjunto de bienes o caudales de una persona’.
3. Asegurar y garantizar: asegurarse se refiere a tener seguro un objeto para cubrirse las espaldas. La palabra asegurar se refiere, por lo general, a la responsabilidad financiera. El verbo garantizar va destinado a una persona. Si hablas en general sobre cuidar de algo o de alguien, utiliza “garantizar(se).
4. Cantidad y contar: cuando utilizamos la palabra cantidad, nos debemos referir a una cantidad de algo que no podemos saber un número exacto . Si no, utilizaríamos el verbo contar.
5. Principio y principal: un principio es un elemento fundamental, los valores que todos tenemos. También se utiliza para referirnos a las leyes y normas. Por su parte, principal se refiere al medio primario o de primera importancia. Muchas veces se utiliza para al dinero.
6. Convencer y persuadir: ambas se refieren a una manera de crear en la mente de otra persona una realidad que uno mismo cree correcta. Pero persuadir implica la búsqueda de unos intereses o unos beneficios mientras que convencer apela a la reflexión crítica y explícita. La persuasión entra en el mundo de lo implícito.