4 sencillos pasos para construir nuevos hábitos
Establecer nuevos hábitos en tu vida no es sencillo, menos aún cuando hay que abandonar otros, pero no es imposible. En esta fotogalería te contamos cómo puedes hacerlo en 4 pasos que no te costarán mucho esfuerzo y sin embargo sí te aportarán buenos resultados si los pones en práctica.
4 sencillos pasos para construir nuevos hábitos
Primer paso: Comenzar por algo pequeño
Lo mejor es hacer las cosas paso por paso cuando se trata de hábitos. Por ejemplo, si no eres capaz de mantener la concentración en una tarea más de 10 minutos seguidos, comienza por desconectarte de todo durante 10 minutos, una vez que consigas hacerlo, puedes ir aumentando el tiempo de desconexión hasta poder mantenerte unos 30 minutos alejado de cualquier distracción. Empieza siempre por un pequeño gesto y ve aumentando.
4 sencillos pasos para construir nuevos hábitos
Segundo paso: Busca un hábito ya existente al que adherir el nuevo
A veces nos resulta complicado encontrar un hueco para establecer nuevos hábitos. Para huir de este falso overbooking de hábitos, lo más sencillo es adherir el nuevo hábito a otro que ya tengamos. Por ejemplo, si quieres leer más y tienes que viajar en tren a diario, lleva un libro contigo y añade una lectura a ese hábito de coger el tren cada día. Matarás dos pájaros de un tiro. Si quieres andar más, tómate en un bar que esté más lejos el café de media mañana.
4 sencillos pasos para construir nuevos hábitos
Tercer paso: Pon las herramientas necesarias a mano
Si tenemos los nuevos hábitos delante de nosotros y los viejos más lejos, lo cercano siempre tirará más de nosotros. Si, por ejemplo, quieres dejar de beber tanto café en el trabajo, lleva una botella grande de agua o zumo y déjala en tu escritorio. Al tener ya cerca algo para beber, es posible que tengas menos ganas de levantarte e ir hasta la máquina a por un café. Tener delante lo necesario para llevar a cabo nuestros nuevos hábitos es una buena táctica.
4 sencillos pasos para construir nuevos hábitos
Cuarto paso: Haz que merezca la pena cumplir
En esto los seres humanos somos muy simples, ¿a quién no le gusta una recompensa por el trabajo bien hecho? Si, por ejemplo, te has propuesto estudiar X horas cada día, puedes ponerte como recompensa hacer algo que te gusta mucho tras el estudio. Haz que merezca la pena habituarse a hacer algo. Eso sí, recuerda que hay hábitos que son obligaciones y no debes tener siempre una recompensa, pero premia tu fuerza de voluntad de vez en cuando.
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