Aquí no te vamos a engañar. Los investigadores de Universidad Estatal de Ohio han llegado a la conclusión de que las personas que creen ciegamente en sus instintos tienen más probabilidad de creer en las noticias falsas.
El estudio, que incluyó tres encuestas, se fijó en las personas que se dejan llevar por sus creencias y por tanto obvian las pruebas, las evidencias y que simplemente se guían por su instinto.
Cada participante tuvo que contestar a 12 cuestiones incluyendo “Confío en mi instinto para saber lo que es verdad y lo que no lo es,” “Las pruebas son más importantes que el sentimiento de que algo es verdad,” y “Los hechos son dictados por aquellos que tienen el poder.”
A la hora de analizar las respuestas de estas preguntas, el equipo juzgó la cantidad de instinto que ponía cada persona, su nivel de creencia ante las pruebas y el hecho de que creyeran que la verdad depende de lo que dicte la política.
Según Kelly Garret, que lideró la investigación y que además es profesor de comunicación en la Universidad Estatal de Ohio: La mayoría de la atención está puesta en nuestras motivaciones políticas, y aunque es importante no deberíamos perder el norte, nuestros prejuicios no tienen porque interferir con los prejuicios de los demás, es más, son dispares.
El equipo también descubrió que nuestros prejuicios tienen un papel muy importante en la forma en que la gente construye sus creencias. Para valorar como las personas realizaban la toma de decisiones, utilizaron temas controvertidos como la conexión entre vacunas y autismo, o si el cambio climático es culpa de la humanidad o no.
Después de ello pasaron a hablar de las teorías conspiratorias. Encontraron que más del 45% no se cree que Kennedy fuera asesinado por Lee Harvey Oswald, mientras que el 33% opina que Martin Luther King fue asesinado por el gobierno de Estados Unidos.
Por ello, según los investigadores, a veces es bueno fiarse de nuestros instintos, pero no en todas las ocasiones. Debemos ser conscientes de que a veces no se puede negar la evidencia, porque entonces empezaremos a creernos todas las noticas falsas que nos aparezcan en el camino.