Por mucho que lo intentemos, la comida saludable no sabe como la comida basura. No lo hace y por desgracia, parece que nunca lo hará. Quien te intente convencer lo contrario miente como un bellaco. Si la comida basura supiera mal, entonces comer saludable sería lo más fácil del mundo.

Pero la verdad es que podemos entrenar a nuestra mente, y a nuestro cerebro, para que nos pida comida saludable. Suena a algo imposible, pero puede que no sea así. Lo mejor es empezar el día con un buen desayuno, y aquí te dejamos 10 recetas de desayunos saludables que no podrás dejar pasar.

Existen técnicas psicológicas para hacer que queramos comida saludable. Esto se lleva acabo eliminando las emociones negativas que rodean a la comida. Otras técnicas tales como, como comer de forma consecuente, también ayudan a eliminar los antojos de comida basura.

Estos antojos se remontan a nuestra infancia—por ello es tan importante las comidas con las cuales crecemos y las que nos generan ciertas emociones. Por ejemplo, si de pequeño te caes al suelo y tu madre te da chucherías para que se te pase la tristeza, tu cerebro creará una asociación que probablemente dure toda la vida.

La comida nunca debe ser la solución para que nuestra tristeza nos abandone. No debemos conectar la tristeza o el enfado con la comida basura, no debemos recompensarnos así. Romper estas asociaciones es realmente un desafío.

Las personas que siempre han comido de forma saludable no se enfrentan a las mismas tentaciones a las que lo hacemos los demás. Aunque esto nos frustre, tenemos delante la prueba de que podemos empezar a tener antojos saludables.

La clave es adoptar un estilo de vida, pero no una adicción por la comida saludable. Si no eres una de esas personas que tienen antojos saludables, existen estrategias para ayudarte a entrenar tu cerebro como escribir un diario donde apuntes todo lo que comes, comer de forma consecuente y manejar tus niveles de estrés.