La casa Rolls-Royce no solo hace coches. También se atreve a entrar en el mundo de los accesorios, pero no como cualquier otro fabricante. El mimo y el lujo se hacen presentes en la Rolls-Royce Cellarette, un cofre para contener whisky y puros y diseñado para entretener y deleitar a los invitados más exigentes.
La Cellarette personifica el auténtico estilo Rolls-Royce: ingeniería de precisión, exquisita artesanía y una presentación de lujo. El chasis de aluminio pulido, envuelto en piel Rolls-Royce Havana repujada y completado con una bandeja de servicio enchapada en Obsidian Ayous Open Pore con incrustaciones de Spirit of Ecstasy convierte a la Cellarette en el accesorio perfecto para cualquier propietario de un Rolls-Royce apasionado de la hospitalidad. Aunque la Cellarette cabe en la parte trasera de cualquier Rolls-Royce, realmente destaca como pieza central en una cena al aire libre o como acompañamiento en una reunión íntima.
El exterior oscuro se abre para emitir un cálido resplandor. Los reflejos de cuero Armagnac se acentúan con una suave luz, evocando la atmósfera más distinguida. Una serie de hermosos accesorios se revelan de forma mecánica, reflejando la apertura de las puertas de un coche Rolls-Royce. Una vez desplegadas, se presentan al cliente unas copas sopladas a mano, exquisitamente decoradas con el monograma «RR». Estos vasos giran hacia el exterior a medida que se abre la unidad, evocando una encantadora sensación de teatro.
Al unísono con los vasos, se revela un magnífico portabotellas de Armagnac forrado de cuero. El soporte, adornado con un «RR», se adapta a diferentes tamaños de botella, que se sujeta magnéticamente mediante un cierre de aluminio pulido, garantizando así la seguridad de cualquiera de las bebidas preferidas del cliente. En el extremo opuesto hay un humidor que, al abrirse, ofrece al usuario una bandeja para puros. Los puros se colocan en la madera de cedro español al nivel de humedad elegido para disfrutarlos de forma óptima, una medida que se controla con precisión mediante un higrómetro. Con un detalle único, el higrómetro recuerda las manecillas del legendario reloj Rolls-Royce.
Acompañando al humidor se encuentran los accesorios perfectos para el entusiasta de los puros. En cada extremo del estuche hay dos recipientes más pequeños que se sujetan magnéticamente: uno para un cortapuros y un encendedor de S. T. Dupont, París, con la expresión del Spirit of Ecstasy grabada, y el otro para un cenicero. Para garantizar un transporte compacto, los portapuros del cenicero sólo se extienden una vez abierto el recipiente.
El Cellarette representa el compromiso de la Casa Rolls-Royce de fabricar los mejores productos y experiencias de lujo para sus clientes, mucho más allá de los confines del entorno automovilístico. Como cualquier producto Rolls-Royce, la Cellarette puede adaptarse a las especificaciones exactas del cliente.
El Rolls-Royce Cellarette puede adquirirse a través de los concesionarios Rolls-Royce, con precios a partir de 50.000 euros.
