Los productores Chris y Roberta Hanley son conocidos por sus innovadores proyectos cinematográficos, como el éxito de culto American Psycho y el debut como directora de Sofia Coppola, Las vírgenes suicidas. Antes de su carrera cinematográfica, Chris también trabajó en el mundo del arte, comerciando con piezas de luminarias como Andy Warhol y Jean-Michel Basquiat.
Cuando llegó el momento de diseñar una casa, la pareja quería, una vez más, algo vanguardista. Los Hanley se asociaron con el arquitecto Tomas Orsinski, colaborador de Frank Gehry, para diseñar su emblemática Casa Invisible en Joshua Tree (California), a dos horas de Los Ángeles. El icono arquitectónico ha salido al mercado por 18 millones de dólares.
Inspirada en el clásico de ciencia ficción 2001: Una odisea del espacio, la casa es una caja de espejos de 5.500 pies cuadrados que refleja el paisaje desértico circundante y parece fundirse con él. El cristal Solarcool, que refleja el calor, confiere a la casa un aspecto único y mantiene los interiores templados a pesar del duro clima del desierto, además de filtrar los dañinos rayos UV. Un tejado de espuma ecológico y un sistema eléctrico-solar hacen de la casa un modelo de sostenibilidad.
Las paredes acristaladas se abren por tres lados para dar un nuevo enfoque al concepto de vida interior-exterior. En el interior, una piscina cubierta climatizada de cien pies está coronada por una pared de proyección de 224 pies cuadrados perfecta para proyectar películas. Cada uno de los tres amplios dormitorios de la casa tiene su propio cuarto de baño con accesorios Boffi. La suite principal está equipada con una estructura de cama de cristal gigante y un baño de cinco estrellas inspirado en los resorts, con bañera, lavabos flotantes y ducha de efecto lluvia.
Una cocina de chef de primera clase facilita la preparación de los eventos con hornos dobles, frigorífico y congelador independientes, superficies de mármol y electrodomésticos Miele, Sub Zero y Wolf sobre un elegante suelo de hormigón. Un sistema de iluminación Flos crea una ambiente radiante con varios colores para adaptarse al estado de ánimo.
Situada en 67 acres de tranquilo desierto, la casa ofrece aislamiento y unidad con la naturaleza. Con cameos en numerosos proyectos cinematográficos y una cobertura más amplia en The World’s Most Amazing Vacation Rentals de Netflix, la casa ha estado disponible tanto como localización cinematográfica como estancia de lujo en Airbnb con un precio por noche de 2.500 a 5.000-6.000 dólares. La propiedad, una buena mezcla de hogar y naturaleza, limita con un parque nacional y una reserva de tortugas cerrada, pero está a sólo diez minutos del centro de Joshua Tree. Otras opciones cercanas para el entretenimiento incluyen el Museo de Arte Noah Purifoy y verdaderamente ilimitadas rutas de senderismo.
Joshua Tree es conocida tanto por sus espectaculares formaciones rocosas como por la peculiar comunidad de artistas que ha surgido entre los espigados árboles del mismo nombre, según TopTenRealEstateDeals.com. Escapando de la jungla corporativa de Los Ángeles, cientos de estudios de pintores y escultores salpican el desierto, dándole un aire a lo Mad Max.
La zona fue también un conocido lugar de peregrinación para las superestrellas del rock clásico, con pesos pesados como Keith Richards, Jim Morrison y Bono inspirándose en su austero paisaje (con, quizás, algo de ayuda psicodélica). Estrellas como Madonna, Kanye West y Justin Bieber han pasado sus vacaciones en la zona, mientras que los estudios de grabación locales han atraído a artistas de la talla de Queens of the Stone Age, Iggy Pop y Beyoncé.
