Los zoomers (o generación Z), impregnados en el análisis pop de la opresión estructural (y siguiendo su particular obsesión por el universo célebre), han proyectado sobre el imaginario colectivo un nuevo concepto, el de los nepo baby (o bebés del nepotismo), que es como han decidido bautizar a toda una generación de hijos de famosos de Hollywood.
Esta visión pone el foco en toda una generación de hijos de familias ricas y famosas que incluso han podido llegar a superar el estatus de sus padres, reflejando el funcionamiento del poder en Hollywood, y cómo estos son beneficiados y encumbrados por un sistema que no destaca precisamente por ser meritocrático.
Las redes sociales se han visto invadidas con conceptos como nepotism baby (o su diminutivo nepo baby) con connotaciones sorpresivas, de envidia y de admiración. Se establece entonces una especie de conspiración suspendida entre colisiones de estrellas y poder, que expone que Hollywood está dirigido por una red invisible de lazos familiares. Una teoría con la que señalan a todos aquellos “hijos de alguien”, como los son la actriz Maya Hawke de Stranger Things (hija de Ethan Hawke y Uma Thurman), o Maude Apatow de Euphoria (hija de Judd Apatow y Leslie Mann).
Como red de referencia de la generación Z, TikTok se ha convertido en el canal a través del cual los zoomer comparten contenidos en serie a través de los cuales destapan las historias de los nepo bebés y sus famosos padres. Algo que siempre ha existido en Hollywood, es decir, que no solo se trata de la joven prole de celebridades que actualmente protagoniza las series y películas de moda, sino también de algunos de esos famosos artistas de los que desconocíamos su ascendencia.
Algunos ejemplos son la actriz Laura Dern (hija de los actores Diane Ladd y Bruce Dern), el actor Robert Downey Jr. (hijo del cineasta Robert Downey Sr.), Gwyneth Paltrow (hija del director y productor Bruce Paltrow y de la actriz Blythe Danner), Angelina Jolie (hija de John Voight), George Clooney (hijo del presentador televisivo Nick Clooney y de la cantante y actriz Rosemary Clooney, o Liza Minnelli (hija del cineasta Vicente Minnelli y de la actriz Judy Garland).
El episodio piloto
El primero de los capítulos de la serie lanzada en TikTok juzga el linaje de personalidades como Kendall Jenner (hija de Kris Jenner y Caitlyn Jenner, y hermana de Kim Kardashian), o la interpretación de Maude Apatow en Euphoria, estandarizando (e incluso menospreciando) sus actitudes y su valor artístico.
«Acabo de enterarme de que la actriz que interpreta a Lexi es un bebé del nepotismo OMG, su madre es Leslie Mann y su padre es director de cine LOL», comentaba la usuaria Meriem Derradji en un post con el que desató la revolución en la red social: consiguió 4.000 me gusta y una oleada de 2.5000 tuits con citas al respecto; y se convirtió en un acto virtual incendiario que desencadenó la escritura de artículos explicativos sobre el tema en cuestión, llevando a los zoomers a nombrar y avergonzar a los nepo babies.
La reacción de Hollywood
Esta clara crítica al nepotismo de Hollywood por dar preferencia a los familiares de las celebridades no ha dejado indiferente a algunos de aquellos a los que se les señala directamente. Zoë Kravitz (hija de Lenny Kravitz y Lisa Bonet) ha expresado la «profunda inseguridad» que le genera la situación. Gwyneth Paltrow (hija de Blythe Danner y Bruce Paltrow) se ha compadecido de ello en una conversación con Hailey Bieber (hija de Stephen Baldwin y sobrina de Alec), en la que asegura: «La gente está dispuesta a derribarte y decirte: ‘No perteneces a ese lugar». Lily Allen les defiende considerando que se trata de una búsqueda de «estabilidad y amor». Y Lottie Moss (hermana de Kate Moss) ha asegurado estar harta del tema: «La vida no es justa».
La glorificación de las estrellas multigeneracionales
Dentro de este espectro o ritual sensacionalista, existen los neonatos clásicos, como herederos de nombres y rasgos famosos como Dakota Johnson o Jack Quaid. Asimismo, comparten espacio figuras como Lena Dunham cuyos padres artistas aportaron el capital cultural necesario, o bebés de la industria como Billie Eilish, hija de una actriz de doblaje.
El credo del nepo baby se articula entonces a raíz de esa idea de que los hijos de los famosos tienen ventaja y ‘la vida ganada’ desde el inicio. Aunque la realidad es que, al fin y al cabo, el talento acaba imponiéndose para estos descendientes viralizados por TikTok, y por nuestra obsesión por las estrellas multigeneracionales.
Y estas personalidades que romantizamos —según una teoría de la académica austriaca Eva Maria Schörgenhuber, recogida en un reportaje del medio anglosajón Vulture— «funcionan como vínculos vivos con una historia compartida de la cultura pop, conectándonos con una visión nostálgica del pasado. Esto se ve claramente en los tipos de nepo bebés con los que la cultura no tiene problemas».
