El Phantom rara vez se rediseña por completo. Estos magníficos automóviles están pensados para durar más allá de los ciclos de la moda, cada uno de ellos diseñado a medida para ser conservado, apreciado y transmitido de generación en generación. Sin embargo, dada la velocidad de la tecnología y de los cambios de los materiales, Rolls-Royce tiende a hacer en su producto estrella retoques, nuevas expresiones que casi siempre son impulsadas por el cliente.
Los autos de estas imágenes están basados en gran medida en el Phantom VIII 2017 en el Phantom VIII de 2017. Los cambios son ligeros: suaves adornos y adaptaciones del diseño original. La evolución más destacada es la de la parrilla del panteón, donde una línea horizontal pulida entre las luces diurnas se sitúa sobre ella. Al mismo tiempo, un sutil refinamiento geométrico resalta la insignia «RR» y la mascota Spirit of Ecstasy, mientras que la parrilla se ilumina de forma similar a la del Rolls-Royce Ghost más pequeño.
Por otra parte, las llantas de acero inoxidable fresadas en 3D con aspectos triangulares están disponibles por encargo en un acabado total o parcialmente pulido. Alternativamente, la nueva llanta de disco en acero inoxidable pulido o lacado negro recuerda el romanticismo de los coches Rolls-Royce de los años 20.