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Las mejores formas de desconectar del trabajo en vacaciones

La imposibilidad de desconectar se ve agravada por la conveniencia y la disponibilidad de la tecnología y los dispositivos.
Foto: Jason Strull (Unsplash)

Si eres como el 68% de las personas, trabajas en vacaciones y te cuesta desconectar –porque te sientes sobrecargado y bajo la presión de trabajar constantemente–. Pero trabajar todo el tiempo sin poder desconectar, escapar o tomarse un descanso puede reducir tu felicidad, tu bienestar e incluso tu eficacia en el trabajo.

Irónicamente, separarte te hace mejorar, tanto con tu familia y amigos, como en tu trabajo.

La presión de estar siempre activo

Según un estudio global de Skynova, los estadounidenses se toman una media de catorce días libres al año y los europeos 24. Además, el 91% de los estadounidenses afirma que su carga de trabajo les impidió tomarse el tiempo libre que necesitaban. La carga de trabajo también impidió a los empleados europeos tomarse tiempo libre. En concreto, el 88% de los trabajadores alemanes, el 87% de los españoles y el 81% de los trabajadores de Francia y Reino Unido.

La imposibilidad de desconectar se ve agravada por la conveniencia y la disponibilidad de la tecnología y los dispositivos. Un estudio realizado por Passportphoto Online descubrió que el 68% de las personas utilizan sus teléfonos inteligentes para trabajar mientras están de viaje y el 62% dijo que el uso de su dispositivo para el trabajo en las vacaciones hizo difícil recargarse o relajarse. Además, las personas sienten que necesitan comprobarlo debido a las expectativas en el trabajo. El 60% afirma que su jefe espera que se comunique con él, y el 55% dice que se siente presionado para responder mientras está fuera, incluso si las políticas formales no lo exigen.

Además, la gente se arrepiente de haber estado conectada, ya que el 66% de las personas dice que desearía haber estado fuera de contacto durante las vacaciones, en lugar de estar conectados.

La necesidad de desconectar

La conexión continua que se produce durante las vacaciones no hace ningún favor a la gente. De hecho, no desconectar puede causar problemas de bienestar y eficacia en el trabajo. Por otro lado, cuando se consigue escapar, se mejora la salud mental y emocional al reducir el estrés. Mejoras las relaciones personales al invertir tiempo con la familia y los amigos, e incluso influyes en tu salud física al reducir las sustancias químicas neurológicas que pueden repercutir negativamente en tu bienestar físico.

También es importante tener en cuenta que desconectar te hace más eficaz en tu trabajo. Para muchas personas, estar conectado es una forma de demostrar su compromiso y participación, y un buen rendimiento. Pero tomarse un tiempo libre te hará ser mejor en tu trabajo porque reduce la presión, permitiéndote pensar mejor. También amplía tus perspectivas, ayudándote a ser más creativo y a resolver mejor los problemas. Tomarte tiempo libre también puede convertirte en un colega o líder más positivo –alguien a quien la gente quiere tener cerca y apoyar– porque puede reducir tu intensidad.

Según el estudio de Skynova, sentirte apoyado en el trabajo, en términos de tiempo libre y bienestar, es fundamental tanto para la satisfacción como para la productividad. Cuando los empleados se sienten muy apoyados en el trabajo, el 92% dice estar satisfecho, frente a sólo el 59% que dice lo mismo cuando no recibe apoyo. La productividad también se ve afectada. Cuando los empleados tienen suficiente tiempo libre, el 58% dice que es productivo, pero sin suficiente tiempo libre, sólo el 26% dice que está trabajando a su máxima productividad.

Cómo desconectar

Cuando estés tratando de desconectar, utiliza estas tácticas:

1 – Realiza un trabajo brillante

Siempre es más fácil desconectar cuando se tiene un alto nivel de credibilidad entre los compañeros, así que prepara el terreno para las vacaciones dando siempre lo mejor de ti y rindiendo bien. Cuando la gente vea que eres un gran colaborador, no cuestionará tu necesidad de desconectar para estar al día.

2 – Establece expectativas

Cuando te vayas de vacaciones, sé claro con tu equipo y tu organización sobre el periodo de tiempo que estarás fuera y tu intención de desconectar. Pon las cosas en orden antes de marcharte y asegúrate de que cuentas con personas que te servirán de apoyo durante tu ausencia.

3 – Escapa de la mente

Desactiva las notificaciones, asegurándote de que estás apagando los pings y dings que te harán volver al trabajo. Mueve temporalmente los iconos de las aplicaciones relacionadas con el trabajo para que sean menos visibles y te sientas menos tentado a consultarlas. Evita también las redes sociales relacionadas con tu empleo. Puede que quieras evitar todas las redes sociales, pero como mínimo, evita las que te hagan pensar en el trabajo.

4 – Empieza con fuerza

Registrarse en el trabajo puede ser un círculo vicioso. Si te conectas y descubres un problema en el primer día de tus vacaciones, resolverlo puede repercutir en el segundo día, y así sucesivamente. En lugar de ello, resiste la tentación de comprobarlo y recuérdate a ti mismo que la gente del trabajo está capacitada para enfrentarse a los retos. Si no lo haces, tu tentación para resolver los problemas que surjan puede aumentar.

5 – Haz una lista

Si los pensamientos de trabajo se arremolinan al comenzar tu tiempo de descanso, permítete capturarlos para poder dejarlos de lado. Utiliza una aplicación tipo bloc de notas que no esté relacionada con el trabajo para hacer una lista de las cosas que no quieres olvidar. A menudo, escribir algo puede ayudarte a sacarlo de tu mente para que puedas emplear toda tu energía en relajarte.

6 – Llena tu tiempo

Una de las razones por las que puedes estar tentado a comprobar el trabajo es para crear una distracción para ti mismo. Planifica con antelación cómo vas a llenar tu tiempo cuando estés fuera. Descárgate todos los libros que quieres leer, planea una excursión de aventura con tu familia o alquila una cabaña en la playa para tener un sitio en primera línea y quedar hipnotizado por las olas.

7 – Valora a tu gente

En general, toma decisiones sobre cómo pasar tu tiempo basándote en tus valores. Recuérdate a ti mismo el impacto que tienes en las personas que te rodean. Además de valorar y potenciar a los demás en el trabajo cuando no estás pendiente de ellos, también estás enviando mensajes positivos a tu familia y amigos cuando estás atento e invirtiendo el tiempo en estar con ellos. Centrarte en las personas de tu vida personal será gratificante para ellos y, por supuesto, para ti.

En resumen, puede ser difícil desconectar. Quieres trabajar con eficacia y te sientes inmerso en tu trabajo. Pero estarás mejor cuando puedas tomarte un respiro, conseguir algo de espacio y encontrar una nueva perspectiva. Piensa en cómo aportar nuevos puntos de vista a los retos que se te presentan en el trabajo. Acepta las formas en las que serás un colega más relajado y feliz cuando vuelvas rejuvenecido de tus vacaciones.

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