El pasado martes, 15 de marzo, Diébédo Francis Kéré hizo historia al convertirse en el primer arquitecto africano y negro en ganar el premio Pritzker, conocido como el Nobel de la arquitectura.
Kéré nació en Gando (Burkina Faso) el 10 April 1965, y con solo siete años dejó su pueblo para irse a vivir con su tío en la ciudad y poder estudiar. Era el deseo de su padre (jefe de un poblado en el que no había escuelas), que quería que su hijo aprendiera a leer y traducir sus cartas. Al terminar su educación se hizo carpintero y se fue a Alemania gracias a una beca de la Sociedad Carl Duisberg. Allí, al acabar la pasantía, entró a estudiar arquitectura en la Universidad Técnica de Berlín.
Si algo tenía claro desde el principio era que debía devolver a su familia y a su pueblo todo aquello que le habían dado. Por eso fue que creó la actual Fundación Kéré (en sus inicios, Schulbausteine für Gando e.V.), en 1998, para construir infraestructuras en su tierra que favorecieran a las siguientes generaciones oportunidades como las que él tuvo. Y en 2004 construyó como proyecto de fin de carrera la primera escuela en Gando, uniendo las técnicas aprendidas durante su estancia en Alemania y los métodos de construcción tradicionales de su país natal.
Desde entonces, a través de su estudio, Kéré Arquitecture, ha diseñado y construido un amplio número de escuelas para todas las etapas de aprendizaje, viviendas, centros de salud y hospitales, entre otros proyectos. Todos ellos desde el compromiso de comprender y dar respuesta a las necesidades del lugar donde han sido construidos. Y también usando el conocimiento y los recursos locales, así como dando empleo a la población. Para Kéré, su arquitectura se sustenta en el compromiso de construir y compartir conocimiento.