«Nunca habíamos estado tanto tiempo fuera de nuestras cocinas; nunca habíamos tenido tanto tiempo para pensar. Lo hemos pasado mal, los bares las cafeterías, las tascas humildes y los chefs con estrella. Pero no me pienso quejar. Los cocineros siempre nos hemos buscado la vida por nosotros mismos. Hoy la hostelería es un negocio frágil, pero los hosteleros somos muy fuertes», arranca el vídeo publicado por el restaurante Arzak donde Jose Mari Arzak anuncia la reapertura de sus puertas el próximo 28 de mayo.
«En este año todos hemos aprendido alguna lección, y yo me quedo con esta: el trabajo de un cocinero es hacer feliz a la gente. Por eso me repito: cuando estés inseguro, remángate y cocina; cuando te asalten las dudas, remángate y cocina; cuando veas a la gente triste, remángate y cocina; y cuando te echen la culpa de esto, remángate y cocina. Abrimos Arzak el 28 de mayo. Te esperamos con las mangas remangadas y con muchas ganas de cocinar», anuncia el chef en el emotivo vídeo.
Un restaurante con historia
La historia de Arzak arranca en 1897 cuando los abuelos de Juan Mari Arzak construyeron la casa en la que hoy en día sigue estando su restaurante. Primero fue una bodega de vinos y taberna. Más tarde los padres de Juan Mari Arzak, lo convirtieron en casa de comidas de cierta relevancia y refinamiento, con Paquita Arratibel como cocinera.
En 1966 Juan Mari Arzak se hace cargo del Restaurante junto a su madre y muy pronto llamó la atención su gran talento, y con tan sólo 32 años, recibió el Premio Nacional de Gastronomía, y el Restaurante Arzak obtuvo la primera estrella de la prestigiosa guía Michelín en 1972.
A partir de mediados de los años 70, comienza a recibir premios y reconocimientos que convierten al Restaurante Arzak en un referente de la gastronomía nacional e internacional. En 1978 obtuvo la segunda estrella Michelín y en 1989 le otorgan la tercera estrella de la Guía Michelín. Fue el segundo restaurante en recibir el triple reconocimiento en España y las mantiene desde entonces.