Robustez y durabilidad es lo que cualquier profano en la materia exigiría a un reloj de carácter militar. Y es exactamente lo que ofrece este cronógrafo de 45 mm de diámetro cuyo aspecto imita al de los aviones de combate de camuflaje. Por supuesto, sus colores son los habituales en los (cada vez más de moda) relojes militares: verde y caqui. En este caso, verde luminoso en la esfera y cerámica negra con inserciones de caucho y caqui mate en la caja de titanio de alta resistencia, un material excepcionalmente fuerte y ligero.

En los relojes esqueletados como este BR-X1 Military es fácil confundirse con la información que aportan, aunque en este caso las agujas y los índices están impregnados del componente luminiscente SuperLuminova, que mejora la lectura tanto de noche como de día. Además de las tres agujas centrales para indicar la hora, los minutos y los segundos del cronógrafo, un contador a las 9 h. marca los minutos del cronógrafo, mientras que a las 3 h. se sitúa un segundero. Una escala taquimétrica circular mide la velocidad, y un movimiento mecánico automático (el calibre BR-Cal.313) da vida al conjunto.

Este modelo, del que solo existen 250 piezas, se equipa con una correa de caucho perforado, y cuesta. PVP: 19.700 €.