Pregúntale a cualquier turista que viaje a Estambul por primera vez cuál es su lugar de visita obligada y seguramente te dirá Santa Sofía. Este monumento de casi 1.500 años de antigüedad recibe a más de 50.000 visitantes diarios.
Santa Sofía es uno de los monumentos religiosos más célebres del mundo. Fue primero una iglesia ortodoxa oriental por el emperador bizantino Justiniano I, luego una mezquita por el Imperio Otomano, un museo por el secularista Mustafa Kemal Atatürk y finalmente volvió a ser mezquita en 2020.
Esta maravilla arquitectónica combina mosaicos cristianos conservados y caligrafía islámica, expuestos uno junto al otro, ofreciendo una visión inigualable de las diversas facetas de la cultura y la espiritualidad de Türkiye.
Santa Sofía. sitio patrimonio de la UNESCO se encuentra actualmente en proceso de extensas obras de preservación, que se han vuelto aún más urgentes debido al reciente terremoto de magnitud 6,2 que azotó Estambul.
Desde esta primavera, Santa Sofía ha entrado en la fase más crucial de su proyecto de restauración plurianual, centrándose específicamente en el refuerzo de la cúpula de 31 metros de ancho. El objetivo principal de esta parte del proyecto es reforzar la estructura ante posibles terremotos futuros, a la vez que se preserva su forma original y se salvaguardan los mosaicos interiores y los detalles arquitectónicos.
«En el peor de los casos, un terremoto sacudiría toda la estructura», declaró a The Guardian Hasan Firat Diker, arquitecto y responsable de la restauración. «El arco principal que conecta la cúpula principal y las semicúpulas podría temblar y producirse grietas».
Un trabajo clave de restauración incluye el refuerzo de la cúpula central mediante estructuras de acero diseñadas a medida, lo que permite que la restauración continúe sin interrumpir la visita de los visitantes ni de los fieles a la mezquita. Las cubiertas exteriores también se desmontarán y repararán o reemplazarán, mientras que un sistema de andamios interior de 43,5 metros de altura contribuirá a la conservación de los mosaicos del interior del edificio histórico.
Se ha escaneado en 3D toda la iglesia de Santa Sofía para crear un gemelo digital del complejo, con vistas a su conservación histórica a largo plazo y a futuras investigaciones.
Esta extensa restauración se produce tras otros proyectos finalizados en los últimos años, como la restauración de las Tumbas de Mehmed III, Selim II y Murad III. El proyecto también incluyó la reapertura de la galería superior a los turistas; los visitantes no musulmanes ya no pueden acceder a la planta baja del edificio, que ahora está reservada para la oración..
