La costa sur de Portugal es uno de los destinos de viaje más bucólicos de Europa. La región del Alentejo, enmarcada por uno de los paisajes más bellos y auténticos del mundo, se asoma al Atlántico con una entorno natural de una belleza salvaje y primigenia -bosques frondosos, colinas suaves, clima perfecto- en el que todo invita a disfrute de la calma.
Allí, ubicado entre Melides y Santiago, entre valles y lagunas, se encuentra wecamp Reserva Alecrim. El eco resort, que traslada la experiencia hotelera al glamping en un concepto de diseño, confort y sostenibilidad al aire libre, es toda una invitación a reconectar con la esencia natural. Diseñado con un enfoque sostenible, sus alojamientos -desde la Domo House a las Casas do Lago, con pantalán privado, los Bungalows o la Villa Oliveira- se integran en el paisaje, respetando su autenticidad y ofreciendo el equilibrio perfecto entre comodidad y simplicidad. Aquí, la arquitectura se pone al servicio de la naturaleza, totalmente integrada en el entorno.

Las zonas comunes de wecamp Reserva Alecrim están concebidas para el descanso. Destacan sus piscinas –la piscina domo climatizada, la piscina infinita con vistas impresionantes sobre el campo alentejano o la piscina biológica, libre de químicos, es un testimonio del compromiso con la sostenibilidad– mientras que los restaurantes ofrecen una carta basada en productos de proximidad y rescatando sabores tradicionales de la cocina alentejana.
Y si hay un momento más especial que otros ese es, aquí, el atardecer. Desde el sunset lounge, el horizonte se tiñe de tonos dorados y rojizos, creando un ambiente perfecto para la desconexión y la contemplación. Además, wecamp Reserva Alecrim no solo ofrece descanso, sino experiencias que nutren el cuerpo y el espíritu. Clases de yoga al amanecer, rutas a caballo por la Laguna de Melides, senderismo, paddle surf o catas de vino son solo algunas de las propuestas diseñadas para quienes buscan una inmersión completa en el entorno. También hay espacio para la creatividad y el aprendizaje: observación astronómica, talleres y actividades para niños convierten la estancia en una vivencia enriquecedora para todas las edades.
Así, más que un lugar para alojarse, wecamp Reserva Alecrim es un destino donde la naturaleza marca el ritmo del viaje. Pura sostenibilidad y sensibilidad.