La ONU Turismo ha elegido a que figuran como los mejores pueblos del mundo bajo el título ‘Best Tourism Villages 2024’, en la que ya es la cuarta edición de estos galardones. Así, y entre las 260 candidaturas provenientes de más de 60 estados miembros de la ONU, dos de los 55 pueblos elegidos en la lista final son españoles.
Se trata de Mura, en la provincia de Barcelona, y Aínsa, en la de Huesca. Así lo ha decidido el Comité Asesor del organismo turístico internacional durante el 122º Consejo Ejecutivo, reunido en Cartagena de Indias (Colombia) los días 13 y 14 de noviembre, y que ha contado con la participación de la secretaria de Estado de Turismo, Rosario Sánchez Grau. Además, Pals (Girona) ha sido seleccionado para participar en el Programa Upgrade para recibir asesoramiento de ONU Turismo y para seguir mejorando y aspirar de nuevo a conseguir el distintivo.
Este último se encuentra a dos horas y media de Pamplona con una altitud de 589 metros sobre el nivel de mar y cuenta con 2.000 habitantes. Además, es el pueblo más grande del municipio y posee una situación privilegiada en la confluencia de los ríos Cinca y Ara, además de una notable presencia de la arquitectura románica (también en sus calles y Plaza Mayor). Este pueblo es además punto estratégico para visitar el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, el Parque Natural Posets-Maladeta y, atravesando el «Biello Sobrarbe», el Parque Natural de la Sierra los Cañones de Guara.
Según indican en la web del municipio, Aínsa es el tercer pueblo de Aragón en conseguir el prestigioso sello Best Tourism Village, tras Alquézar y Cantavieja previamente, compartiendo los tres el título de los Pueblos Más Bonitos de España. Aínsa, además fue capital del turismo rural en 2018 y ostentó la capitalidad de las montañas en 2020 y 2021.
Por su parte, Mura se enclava en el Bages y es uno de los vestigios mejor conservados de la esencia medieval en la región; desde su casco antiguo, con las casas de piedra y las calles empedradas, pasando por su iglesia románica de Sant Martí (que data del año 1088) y la Casa Museo Puig de la Balma, donde se pueden encontrar una gran extensión de utensilios antiguos. Además, el municipio premiado se sitúa en el Parque Natural de Sant Llorenç del Munt i l’Obac, con grandes bosques de pinos, encinas y robles, una gran extensión de cuevas y los picos de la Mola y el Montacau, perfectos para disfrutar de un ambiente tranquilo y en contacto con la naturaleza.
Según señalaron desde la organización, los destinos rurales «consolidan su posición clave en el turismo sostenible y el desarrollo comunitario». Al igual que en ediciones anteriores, se evaluaron nueve ámbitos principales: recursos culturales y naturales, promoción y conservación de los recursos culturales, sostenibilidad económica, social y ambiental, desarrollo turístico e integración de la cadena de valor, gobernanza y priorización del turismo, infraestructura y conectividad y salud y seguridad.
Asimismo, y ante este reconomiento, la Secretaria de Estado de Turismo ha felicitado a estos municipios por ser fuente de inspiración para la España Rural, demostrando que el turismo se puede convertir en uno de los motores de desarrollo y bienestar de sus comunidades locales. “El compromiso de España con la sostenibilidad es la esencia de la estrategia turística española y una forma de gestionar nuestros destinos”, ha dicho Rosario Sánchez Grau.
