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Este es el retiro de yoga y ayurveda en la India que ha convencido a los responsables de Relais & Châteaux

Se trata de Shreyas Retreat, está en las inmediaciones de Bangalore y ofrece paquetes de estancia de tres a 28 noches
Tratamiento de bienestar en el spa de Shreyas Retreat, en Bangalore (India). Foto: Relais & Châteaux

No hace mucho una veterana estadounidense de Nueva York supo resumir mejor que yo el atractivo de Shreyas Retreat en la India. Había encontrado este lugar seis años antes, cuando le pidió a su marido que la llevara al sur de ese país para celebrar su 70º cumpleaños y participar en panchakarma, un programa de rejuvenecimiento ayurvédico.

Quería algo real pero no demasiado, confortable pero no tan elegante como para “perder su alma”, tal y como pensaba que ocurriría en algunos de los famosos y más lujosos spas del país. «Y así encontré este lugar», me dijo durante un desayuno ayurvédico de frutas, miel y cereales. «Todo lo demás me parecía adulterado o, ya sabes, había vacas en el comedor».

Anillos de césped rodeados y anfiteatro en el retiro de yoga Shreyas cerca de Bangalore, India
Retiro de Shreyas. CORTESÍA DEL HOTEL

Ha vuelto a Shreyas porque aquí ha encontrado su ideal del término medio. Este retiro de 10 hectáreas, una antigua granja de mijo en las afueras de Bangalore, tiene una estrecha conexión con la naturaleza y una estricta dedicación al bienestar y las filosofías espirituales de la India. Aun así, es cómodo. El alojamiento y la cocina son bastante sencillos pero con una calidad que trajo hasta aquí a los prestigiosos Relais & Châteaux, siempre asociada con los restaurantes de alta cocina, y los convenció.

Varias de las 14 habitaciones están en «tiendas de campaña» de paredes sólidas, aire acondicionado y agua corriente, pero que se perciben plenamente integradas en los jardines. Otras más son habitaciones estándar de hotel alrededor de la piscina. Y las mejores son las nuevas cabañas con jardín, cada una de 140 metros cuadrados y con una agradable distribución de espacios interiores y exteriores. Hay suelos y bancos de piedra natural, pero para ser honestos, mis espacios favoritos fueron el escritorio y el papel estampado tras el cabecero de la cama.

Algunas de las habitaciones del Shreyas yoga Retreat en Bangalore, India, tienen papel tapiz estampado.
El dormitorio de una de las suites del jardín. CORTESÍA DEL HOTEL

Pero este es uno de esos lugares donde no se debe pasar mucho tiempo en la habitación (y ciertamente no frente al ordenador, aunque no haya nadie para juzgarlo o vigilarlo). Los huéspedes no reservan habitaciones, sino paquetes, que incluyen clases diarias de yoga y meditación, consultas privadas con médicos ayurvédicos o naturópatas, tratamientos de spa indios e internacionales y estudiadas comidas. Los paquetes de estancia pueden durar entre tres y 28 noches.

Algunos huéspedes optan por una inmersión en yoga (hay Hatha y Ashtanga diarios) o un tratamiento de bienestar suave y amable. El nombre Shreyas significa “excelencia en todas las cosas”, dicen, recordando que el objetivo es el equilibrio, es decir, no solo ser excelentes en lo que nos gusta o en lo que somos buenos. Aun así, se recuerda a los clientes que todo es opcional y no hay nada de malo en dormirse mientras se practica yoga.

También hay programas más rigurosos para aquellos huéspedes que lo deseen. Incluidos retiros de silencio, desintoxicación y ese panchakarma ayurvédico, que describen como una serie de cinco tratamientos de “limpieza, purificación y rejuvenecimiento”. Durante mi estancia, algunos huéspedes vinieron a perder peso, a mejorar sus problemas de movilidad o a recuperarse del herpes zóster. Y todos quedaron satisfechos con los resultados. Shreyas también ofrece consultas para personas que buscan “soluciones alternativas” a complicaciones poscovid, rehabilitación del cáncer, problemas gastrointestinales y adicciones.

La comida orgánica no es especialmente picante, pero sí variada y abundante. Se sirve en el porche frente al restaurante, al lado de la piscina o en otros lugares del establecimiento. Puede parecer ligera para alguien que no esté acostumbrado a la comida vegetariana, pero los camareros ofrecen siempre segundos y terceros platos (excepto a los invitados que están allí para perder peso o desintoxicarse), y las propuestas varían en cada servicio de comida.

Una mesa puesta con desayuno y jugo rosado junto a la piscina en Shreyas Retreat en India
Desayuno junto a la piscina. CORTESÍA DEL HOTEL

Los empleados viven según los mismos principios de este retiro, con su propio yoga, meditación y supervisión médica diaria. Un principio central es Athiti Devo Bhava, es decir, «trata a tu huésped como una encarnación de lo Divino». Por fortuna, esto se traduce en una hospitalidad atenta, no en una adoración absoluta.

Para los visitantes, las sesiones formativas son lo más destacado. Durante mi estancia, los huéspedes elogiaron a un instructor que lucía esa sonrisa beatífica que surge tras toda una vida viviendo según la filosofía que se defiende. Sus charlas espirituales están repletas de consejos que pueden sonar cursis pero que en realidad tienen todo su sentido.

“Para ser feliz hay que querer menos”, afirma. “Si eres feliz, no necesitas mucho. Si no eres feliz, nada es suficiente”. O “no trabajes para ser feliz después. Eso hace que la felicidad se sitúe el futuro y que nunca la alcances. Encuentra una manera de ser feliz haciendo lo que sea que estés haciendo”. También, “no puedes hacer felices a los demás a menos que tú mismo seas feliz. No puedes compartir algo que no tienes”. Y “no puedes salvar al mundo, pero puedes salvarte a ti mismo. Y si lo haces, serás algo menos en el mundo que requiera ser salvado”.

Y mi favorito: “el problema de participar en una carrera de ratas es que, incluso si la ganas, sigues siendo una rata”.

Este tema es un extracto del publicado en Forbes.com, que se puede leer en su versión original aquí.

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