La semana pasada la Comisión Europea adoptó un paquete regulatorio centrado en las operaciones VTOL, con el objetivo de unificar y racionalizar el panorama normativo en todos los Estados miembros de la Unión Europea, mejorando la supervisión y las normas de seguridad operativa.
En concreto, el paquete se centra en dos ámbitos emergentes de la aviación: por un lado, las aeronaves tripuladas capaces de despegar y aterrizar verticalmente (VTOL tripuladas o taxis aéreos), que son pequeñas aeronaves comerciales que realizan vuelos cortos bajo demanda; por otro, las operaciones con drones no tripulados, de mayor riesgo, o las denominadas de «categoría específica».
Para la comisaria de Transportes, Adina Valean, con este marco reglamentario, la UE reafirma su posición como líder mundial en seguridad e innovación de la aviación. Según sus propias palabras, «esta iniciativa promete desbloquear todo el potencial de la movilidad aérea innovadora, estableciendo nuevos estándares para el transporte urbano en el siglo XXI y más allá».
En pro de la seguridad aérea
Entre las medidas adoptadas, se introducirán nuevos requisitos y procedimientos de certificación de la aeronavegabilidad en toda la UE para los VTOL tripulados y no tripulados, abordando tanto la integridad física como los riesgos de seguridad digital que podrían afectar a su funcionamiento seguro.
También se incluirán requisitos para la licencia de piloto de taxi aéreo, normas sobre integración en el espacio aéreo (definición de trayectorias de vuelo o normas de despegue y aterrizaje), así como regulaciones específicas que permitan a estas aeronaves realizar servicios médicos de urgencia y operaciones de rescate.
Además, la Agencia de la Unión Europea para la Seguridad Aérea (EASA) ha avisado en un comunicado que los taxis aéreos requerirán una certificación suya, antes de que dichos servicios puedan entrar en funcionamiento en Europa.
El paquete es una acción «clave» de la Estrategia 2.0 de la Unión Europea sobre drones, adoptada en noviembre de 2022, cuyo objetivo es fomentar un sector de aeronaves no tripuladas inteligente y sostenible en toda Europa. Se suma al Reglamento sobre el espacio aéreo no tripulado, que entró en vigor en 2023.