Hora de mujer

Estos cinco relojes nuevos bajan la Luna hasta la muñeca

El espectáculo astronómico de la superluna de octubre nos invita a fijarnos en los modelos que la incluyen.

El único astro que orbita la Tierra es el protagonista de los cielos en los meses de octubre, en los que agranda su tamaño y se muestra más brillante durante el plenilunio (el próximo día 6), al estar más cerca de nosotros en su viaje alrededor del planeta. Es lo que se conoce como perigeo. Si ese día se te olvida alzar la vista, siempre puedes admirar a la Luna en tu muñeca, a través de estos relojes que acaban de ver la luz del Sol.

Por primera vez

Ésta es la primera vez que la relojera suiza Tudor, hermana pequeña de Rolex, introduce la complicación de las fases lunares en uno de sus modelos de pulsera. Lo ha hecho en un Tudor 1926, su clásica línea de vestir, así que el nuevo Tudor 1926 Luna se aleja de los relojes herramienta (sobre todo, de buceo) a los que nos tiene acostumbrados la marca. Y bienvenido sea este lanzamiento, porque les ha quedado un reloj bastante atractivo y moderno. También asequible, pues, en vez de desarrollar un movimiento propio, han introducido uno de la casa Sellita, que proporciona calibres a muchas firmas de la industria.

  • Movimiento: automático; Calibre T607-9; 38 h de reserva de marcha aprox.
  • Funciones: horas, minutos, segundos, fecha y fases lunares
  • Caja: acero; 39 mm de diámetro y 10,1 mm de grosor; fondo opaco; hermeticidad: 100 m
  • Esfera: negra
  • Correa: brazalete de acero
  • Precio: 2.630 €

Como una moneda

También rodeado de metal llega el Classics Moneta Moonphase de Frederique Constant, que ha elegido un brazalete denominado de malla milanesa para ceñirlo a la muñeca y un color azul que muchas relojeras suelen escoger para sus relojes «lunares». Su esfera es limpísima, ya que prescinde de la fecha (todo un acierto) y hasta de la aguja de los segundos. El modelo se caracteriza por que traslada el tradicional bisel estriado, como el canto de una moneda (de ahí su nombre) al realce, ubicado en la periferia de la esfera. Su tamaño es idealmente compacto: 37 mm de diámetro.

  • Movimiento: cuarzo; Calibre FC-206
  • Funciones: horas, minutos y fases lunares
  • Caja: acero; 37 mm de diámetro y 7,65 mm de grosor; fondo opaco
  • Esfera: azul
  • Correa: brazalete de acero; cierre de hebilla plegable
  • Precio: 1.295 €

Aún más distinguido

Algo más serio es este Portofino Automático Día y Noche 34 de IWC Schaffhausen, porque está fabricado en oro rojo y exhibe 12 pequeños diamantes de talla brillante que en realidad no necesita, puesto que los índices de bastón aplicados se nos antojan suficientes, aunque seguramente se hayan elegido para dar luz a la esfera. Elevado a la categoría de relojes de vestir, muestra un indicador del día y de la noche (que no de las fases lunares en esta ocasión) elegante. Una pequeña flecha negra señala al sol o a la luna en la subesfera de las 6 h., en la que ambos astros giran en una rotación de 24 horas.

  • Movimiento: automático; Calibre 35180; 50 h de reserva de marcha aprox.
  • Funciones: horas, minutos, segundos e indicación día/noche
  • Caja: oro rojo; 34 mm de diámetro y 8,9 mm de grosor; fondo opaco
  • Esfera: plateada; 12 diamantes en los índices
  • Correa: piel de ternero topo intercambiable
  • Precio: 18.400 €

Femenino al cuadrado

Si la de las fases lunares se considera la más romántica y femenina de todas las complicaciones relojeras, este nuevo PrimaLuna Moonphase de Longines acentúa ese carácter con su esfera nacarada y sus diamantes en el lugar de los índices. Pequeño y con el toque de rojo pasión que le aporta la correa de piel, indica también la fecha en un disco alrededor de la subesfera de las 6 h. Lo luce en la imagen superior la actriz Jennifer Lawrence, embajadora de Longines.

  • Movimiento: automático; Calibre L899; 72 h de reserva de marcha aprox.
  • Funciones: horas, minutos, segundos, fecha y fases de la luna
  • Caja: acero; 34 mm de diámetro y 11,6 mm de grosor; fondo de cristal de zafiro
  • Esfera: blanca nacarada; Índices de diamante (0.060 quilates)
  • Correa: piel de caimán; cierre triple desplegable y mecanismo de apertura mediante pulsador
  • Precio: 3.450 €

El más divertido

El MoonSwatch lleva tres años reproduciendo con materiales asequibles y un movimiento de cuarzo el diseño del exitoso Speedmaster Moonwatch de Omega, el primer reloj que viajó a la Luna. Pues bien, el pasado verano recaló en algunas tiendas Swatch una nueva tanda de MoonSwatch dedicada al satélite terrestre, Mission to EarthPhase Moonshine Gold, con un toque de oro Moonshine de Omega, una aleación de oro amarillo propia de la marca que se aplicaba al indicador de las fases lunares, a las 2 h. Aquel reloj solo se vendió durante un día, pero como surge otro similar en cada luna nueva, el de octubre está al caer. Como los anteriores, ofrecerá un indicador de fases terrestres, una ilustración de Snoopy y su amigo Woodstock, una frase que solo se lee bajo la luz ultravioleta y una luna de nuevo diseño (quizás relacionada con la “luna del cazador”, que es como se conoce al plenilunio de noviembre).

  • Movimiento: cuarzo
  • Funciones: horas, minutos, segundos, cronógrafo (solo segundos), fases lunares y fases terrestres
  • Caja: Bioceramic; 42 mm de diámetro y 13,75 mm de grosor; fondo opaco
  • Esfera: blanca iridiscente, con ilustración de Snoopy y Woodstock y frase oculta que se revela bajo luz ultravioleta; índices y agujas con material luminiscente de emisión verde
  • Correa: caucho azul marino con cierre de velcro
  • Precio: 385 €