En los Emmy de esta semana, las mujeres mayores de 50 años dominaron la lista. Jean Smart, de 74 años, Jamie Lee Curtis, de 66, y Katherine LaNasa, de 58, se llevaron premios, mientras que Kathy Bates, de 77, Catherine O’Hara, de 71, y Sharon Hogan, de 55, también fueron nominadas. Si bien estos premios pueden hacer parecer que la discriminación por edad contra las mujeres en Hollywood es cosa del pasado, un nuevo estudio revela que estas actrices son la excepción y que los papeles para mujeres mayores de 40 años siguen siendo escasos.
El informe, elaborado por Martha Lauzen, directora ejecutiva del Centro para el Estudio de la Mujer en la Televisión y el Cine de la Universidad Estatal de San Diego, analizó el papel de las mujeres y los hombres en la televisión abierta y en streaming en 2024-25. Descubrió que, una vez que los actores cumplen 40 años, los hombres tienen muchas más probabilidades de conseguir papeles que las mujeres.
Las mujeres mayores de 40 años en Hollywood
La brecha de edad y género era pronunciada. La mayoría de los personajes femeninos principales en la televisión abierta y en streaming tenían entre 20 y 30 años (60%), mientras que la mayoría de los personajes masculinos tenían entre 30 y 40 años (60%).
Además, la investigación reveló una marcada disminución en los papeles para mujeres mayores de 40 años. Mientras que el 41% de los personajes femeninos tenían entre 30 y 40 años, solo el 16% tenía entre 40 y 49 años. En el caso de los hombres, la tendencia es la contraria, con más personajes masculinos importantes de entre 40 y 49 años que de entre 30 y 49 años en pantalla. De hecho, más de la mitad (54%) de los personajes masculinos importantes en la televisión abierta y en streaming son mayores de 40 años. Solo el 29% de los personajes femeninos tenían más de 40 años.
La situación empeora para las mujeres de mayor edad. Hay más del doble de personajes masculinos importantes de sesenta años que de personajes femeninos.
¿Una cuestión de apariencia o de talento?
“No creo que sea casualidad ni coincidencia que los personajes femeninos empiecen a desaparecer de la pantalla grande y pequeña alrededor de los 40”, me dijo Lauzen. Explicó por qué: “Los personajes masculinos suelen ser valorados por lo que hacen, por lo que logran. Los personajes femeninos suelen ser valorados por su apariencia y por su apego”.
Lo que vemos en la pantalla moldea nuestra percepción de las mujeres, por lo que es un problema que los roles femeninos se inclinen por la juventud. «Mantener a los personajes jóvenes también tiende a restarles poder, tanto profesional como personalmente», explica Lauzen. Cuando vemos principalmente a hombres en la pantalla representados en puestos de poder, esto moldea nuestras expectativas en el mundo real.
Este patrón no solo ocurre en la pantalla chica, sino que las mujeres mayores en muchos lugares de trabajo se enfrentan a un despido similar. En un estudio, publicado en el Journal of Political Economy , los investigadores enviaron 40.000 solicitudes de empleo, variando la edad, el género y la experiencia en el currículum. El objetivo era determinar qué currículums tenían más probabilidades de ser devueltos. «Encontramos evidencia sólida de discriminación por edad en la contratación contra las mujeres mayores, especialmente aquellas cercanas a la edad de jubilación, pero considerablemente menos evidencia de discriminación por edad contra los hombres», concluyeron los autores en el artículo.
Aún premiadas, se sienten -invisibles-
En otro estudio, publicado en el Journal of Women & Aging , las mujeres mayores afirman sentirse «invisibles». En entrevistas, describen haber sido tratadas con condescendencia y consideradas (erróneamente) incompetentes, especialmente en el ámbito tecnológico. Estas mujeres informaron que la falta de personajes femeninos mayores en cine y televisión acentuaba su sensación de invisibilidad.
A pesar del éxito de Kathy Bates, Jean Smart y Jamie Lee Curtis en los Emmy, los personajes que estas mujeres interpretaron son excepcionales. Sin embargo, no sorprende que fueran elegidas para ganar los premios. Como en la mayoría de las profesiones, su edad y experiencia las convierten en mejores actrices, no peores. Y los personajes que interpretan pueden ser más matizados. «Como característica fundamental, su edad permite a los guionistas retratar a estas mujeres de forma más compleja y completa. Sus acciones y perspectiva reflejan su experiencia vital», explica Lauzen.
