Jacob Elordi (Brisbane, Australia, 28 años) ya conquistó Netflix, Instagram y lujosas portadas moda. Le bastaron un par de series juveniles, dos cejas perfectas y una mandíbula tallada a mano. Pero quería algo que no se consigue simplemente con un buen par de abdominales: que lo tomen en serio. Y lo ha conseguido con Indomables (2024), adaptación de la novela de Shannon Pufahl dirigida por Daniel Minahan (Game of Thrones, The L Word).
En este complicado drama romántico, Elordi deja atrás cualquier etiqueta de «ídolo teen» y se pone serio. Entre apuestas, carreras de caballos, tonos de cine negro y un complejo triángulo amoroso representado junto a Muriel (Daisy Edgar-Jones) y Lee (Will Poulter), nos muestra otra faceta profesional más allá de su arrebatador físico que parece hecho de encargo.
Hollywood vuelve a los clásicos
Ambientada en la posguerra estadounidense (años 50), el tráiler describe este proyecto como «la clase de gran drama romántico que Hollywood ya no hace». La historia gira en torno a Muriel y Lee, dos jóvenes recién casados que dejan su vida en Kansas para comenzar una nueva en San Diego.
Mientras tanto, el hermano de Lee, Julius (Jacob Elordi), regresa de la Guerra de Corea sin ningún plan de futuro, dándole un giro 360º a la vida de la pareja. La tensión entre Muriel y Julius es evidente, pero no es la única. La relación entre Julius y el propio Lee es la que interesa al público. Pero no más spoilers… el resto en el cine este viernes 8 de agosto.
Mucho más que una bonita sonrisa
Después de Euphoria (2019), Priscilla (2023), Saltburn (2023) llega Indomables, para dejar claro que la carrera de Elordi va mucho más allá del fenómeno fan. El papel de Lee es exigente y poco complaciente, una buena noticia para quienes ven en Elordi un actor digno de Hollywood.
Aunque nació en Brisbane, el actor lleva Bilbao en la sangre. Puede hablar con naturalidad de la ikurriña, del Guernica y de su abuelo vizcaíno que llegó a Australia con ocho dólares en el bolsillo. Hablando de bolsillos, el del crush de medio planeta cuenta con varios ceros más. Con tan solo 28 años, Elordi acumula una fortuna estimada en más de 4 millones de dólares.
