El Papa Francisco se encargó durante su pontificio de acercar la Iglesia y el cristianismo al mundo entero, siendo uno de los papas más inclusivos y abiertos que hemos tenido. Recientemente pudimos oírle entonar estas palabras: «Cuando mandan las mujeres, las cosas funcionan. Gracias, y gracias a todos ustedes», que sustentaron su apoyo a las mujeres. Sin embargo, el pontífice no era solo de decir, sino que se encargó de hacer también.
El 6 de enero de este mismo año, Jorge Mario Bergoglio hizo historia nombrando por primera vez a una mujer como Prefecto de un Dicasterio de la Curia Romana. Simona Brambilla (Monza, 60 años) es una monja católica italiana y la primera mujer en ser Prefecta del Dicasterio para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica.
Una pionera en el Vaticano
Sor Brambilla se graduó como enfermera en 1986 y trabajó en el hospital Leopoldo Mandic de Merate. Dos años después, ingresó en el Instituto de las Misioneras de la Consolata.
En 1998 se licenció en psicología en el Instituto de Psicología de la Pontificia Universidad Gregoriana. Un años después, en 1999 se encaminó como misionera en Mozambique, donde fue responsable de la pastoral juvenil en el centro de estudios Macua Xirima de Maua. Fue tal su pasión y dedicación por el país africano que en 2008 se doctoró en psicología con una tesis sobre evangelización e inculturación en Mozambique.
Desde 2011 hasta 2023, Brambilla dirigió el Instituto de las Misioneras de la Consolata llegando a convertirse en Superiora del mismo. Un año después, en 2024 fue nombrada secretaria del Dicasterio para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica, y en enero de 2025, fue nombrada por el Papa como Prefecta del mismo .
Esta denominación significa que Brambilla es la máxima autoridad de una institución religiosa cuya misión es vigilar las órdenes religiosas, de hombres y mujeres, y cómo se relacionan con sus seguidores.
Papa y feminista
Desde el nombramiento del Papa Francisco, la presencia de mujeres ha aumentado significativamente en la Iglesia y el Vaticano. Según los datos globales tanto respecto a la Santa Sede como al Estado de la Ciudad del Vaticano, y que van de 2013 a 2023, el porcentaje femenino pasó del 19 al 23 por ciento convirtiendo a este Papa en uno de los que más han apoyado a las mujeres y cumpliendo su visión de dar a las mujeres mayor protagonismo en las posiciones de liderazgo en la Iglesia católica.