El Black Friday se ha convertido en sinónimo de consumo masivo e impulsivo. Pero Ecoalf, la marca de moda sostenible, vuelve a romper moldes. Este año, en lugar de sumarse a la oleada de descuentos, nos lleva al Desierto de Atacama, el mayor vertedero textil del mundo, para mostrarnos las consecuencias reales del fast fashion.
Atacama: el espejo de nuestro consumo
Más de 39.000 toneladas de ropa desechada llegan cada año al desierto chileno. Prendas de baja calidad, fabricadas con fibras sintéticas, que permanecerán allí durante siglos.
«Siempre hemos utilizado el Black Friday como un momento para generar conciencia, pero este año queríamos ir un paso más allá», señala Javier Goyeneche, fundador y presidente de Ecoalf. «No basta con compartir estadísticas: hemos visitado el Desierto de Atacama para enseñar lo que pasa con la ropa cuando se tira y se olvida. Los montones de prendas desechadas no son solo números; es una realidad que está en otras partes del mundo».
La directora Stella Banderas, quien narró el documental, comparte: «Mi viaje con Ecoalf al Desierto de Atacama fue una experiencia profunda e impactante. Espero que este proyecto ayude a mostrar la realidad a la que nos enfrentamos y subraye la responsabilidad que tenemos todos de generar un cambio: rechazar la moda rápida, priorizar la calidad sobre la cantidad y comprar menos».
«0% de descuentos»: una llamada a la acción
Con imágenes impactantes y mensajes contundentes, Ecoalf lanza su campaña de «0% de descuentos». La propuesta es clara: invertir en prendas atemporales, hechas con materiales reciclados y diseñadas para durar.
«Lo fácil es culpar a las marcas, pero cada vez que compramos, estamos apoyando ese modelo de negocio y lo que implica para el planeta», enfatiza Goyeneche. El poder del cambio está en nuestras manos.
Únete a la reflexión
El documental se estrenará este 25 de noviembre a las 21:00 CET en el Instagram de Ecoalf. Es una oportunidad para detenernos y considerar cómo nuestras elecciones diarias afectan al planeta.
Al final, no se trata solo de comprar menos, sino de comprar mejor. Ecoalf nos recuerda que cada pequeño cambio cuenta y que es posible marcar la diferencia, incluso en días como el Black Friday.
Rompe el hábito, no el planeta.