La conciencia corporal y la libertad de movimiento son la base de las creaciones de Gabrielle Chanel. En presente, ya que 53 años después de su muerte su estela y su poder de influencia siguen más vivas que nunca. Ella sigue en el centro de las creaciones, liderando los diseños y la aguja, como en sus inicios. Lo vemos en su icónico traje de dos piezas, diseño recurrente en cada colección que vemos sobre la pasarela, temporada tras temporada, y en Haute Joaillerie Sport, la propuesta de joyería que llena estas páginas. Si bien su look estrella ha sido versionado tantas veces como directores creativos han pasado por la marca, en joyería ocurre algo similar. La inspiración es la norma.
Si pensamos en Gabrielle Chanel, Coco para los amigos, es fácil recordar su estilo: caracterizado desde el principio por un carácter deportivo. Tanto que en 1921 creó un taller sport en el seno de su casa de Alta Costura. A ella le debemos que la mujer se deshiciera del corsé y que montar a caballo de la manera convencional que conocemos no fuera sólo cosa de hombre. ¿Cómo? Dotando a la mujer de la misma indumentaria. Su obsecación por combinar elegancia y rendimiento le llevó a ser pionera en su oficio, y es en esa pasión por las primeras veces en las que se ha fijado Patrice Leguéreau, director del estudio creativo de joyas de Chanel, para crear una colección de alta joyería deportiva para la Casa.
Pendientes Graphic Line en oro blanco, diamantes, laca roja y azul.
Los diseños celebran por primera vez en este campo el estilo deportivo de la marca y ponen en primera línea la intención más importante: resaltar el movimiento –encanto de una mujer– a través de la estética, la técnica y una selección excepcional de piedras preciosas. El resultado es una colección de joyas de líneas depuradas y estilizadas acercadas a la realidad anatómica del cuerpo, de la misma manera que lo hace la ropa deportiva.
En toda su intensidad, viva y luminosa, las joyas destacan por su combinación bicolor, formando pareja de piedras, para una mayor versatilidad. Por cierto, también presente en los materiales usados, que desencorsetan la joyería rígida para ofrecer opciones menos pesadas pero igual de auténticas. Un triunfo debido al savoir-faire de la Maison que ha estado siempre dirigido a crear su propia estética distintiva. Los archivos de la marca y la influencia de la mujer que marcó el camino han redefinido el lujo en matería de joyería.