La inauguración de la tienda de Johanna Ortiz en Madison Avenue marca un momento significativo en la carrera de la diseñadora colombiana, quien combina la elegancia tropical con un compromiso profundo hacia la artesanía y el empoderamiento femenino.
La tienda está diseñada personalmente por Johanna Ortiz junto a la arquitecta Jessica Hyland, y el espacio está adornado con una colección de arte latinoamericano y objetos de artistas como Ana Gonzalez y Francisco Jaramillo. «Me encanta el diseño de interiores y diseñé personalmente el espacio pensando en cada detalle», comenta la diseñadora. Cada rincón de la tienda está pensado para transportar a los visitantes al universo creativo de la marca, desde el Canasto bar hasta el Sunset room, que evocan la belleza natural y el realismo mágico que tanto inspiran a la diseñadora.
La elección de Madison Avenue no es casual. Esta prestigiosa ubicación permitirá a Johanna Ortiz no sólo reforzar su posición como una marca de lujo y estilo de vida, sino también acercarse más a sus clientas, estableciendo vínculos personales y creando experiencias únicas. «La idea es conocer más de cerca a nuestras mujeres JO, establecer un vínculo personal, crear cosas a su medida, ser parte de su día a día, de sus eventos, sus viajes y crecer de la mano de ellas», explica Johanna.
La visión de Johanna Ortiz no se detiene en Nueva York. Con planes de abrir dos nuevas tiendas el próximo año y continuar con su tienda itinerante JO Caravan, la diseñadora está comprometida con el crecimiento de su marca. «Tenemos clara nuestra estrategia para mantener el crecimiento exponencial que hemos tenido», afirma Ortíz. Además, busca fortalecer su e-commerce y diversificar su oferta con nuevas categorías como knitwear, accesorios, artículos de marroquinería (carteras, zapatos), joyería y casa, siempre manteniendo un enfoque en la moda responsable y la creación de empleo en Colombia.
Desde sus inicios en Cali, Colombia, en 2003, Johanna Ortiz ha sido reconocida mundialmente por su habilidad para capturar la esencia de la sofisticación europea y la pasión vibrante de América Latina en cada una de sus creaciones. Sus colecciones, admiradas tanto por celebridades como por la élite de la moda, han establecido un estándar de elegancia y sostenibilidad en la industria.
Más allá de su éxito empresarial, Johanna Ortiz también ha demostrado un firme compromiso social y la preservación de las técnicas artesanales. A través de iniciativas como la Escuela Johanna Ortiz y colaboraciones con comunidades locales en Colombia, ha apoyado el empoderamiento de mujeres y la conservación del patrimonio cultural.
A través de la Escuela Johanna Ortiz, la diseñadora ha brindado oportunidades de formación y empleo a más de 200 personas, la mayoría mujeres en situaciones vulnerables. «Ha sido mi propósito, lo que me mueve y me llena de satisfacción», comparte Johanna. Este programa ofrece capacitación técnica, apoyo emocional y social, promoviendo una transformación integral en sus beneficiarios. «Pagamos salario desde el primer día de formación y también proporcionamos transporte y alimentación para que las personas puedan venir a estudiar y dar su máximo potencial sin tener que desertar por las dificultades económicas que enfrentan en su día a día», añade la diseñadora.
La sostenibilidad es otra pieza clave en su estrategia. Con iniciativas que incluyen la reforestación del Amazonas y el apoyo a comunidades indígenas, la diseñadora demuestra que es posible combinar el crecimiento comercial con la responsabilidad ambiental. «Cuanto más crezcamos, más crecen nuestros colaboradores y beneficiarios», dice Ortiz. Su enfoque en la producción ética y el apoyo a artesanos locales refleja su compromiso con la conservación del conocimiento tradicional y el desarrollo local. «El 90% de nuestras piezas se fabrican éticamente en nuestro atelier en Cali, Colombia«, resalta la colombiana.
Johanna Ortiz no solo es una diseñadora visionaria, sino también una líder empresarial que ha integrado principios éticos y creativos en el núcleo de su marca. Reconocida por su capacidad para capturar la esencia del espíritu latinoamericano en cada una de sus colecciones, ha sido aclamada por su enfoque único y su compromiso con la excelencia.
A lo largo de su carrera, Johanna Ortiz ha sabido equilibrar la creatividad con la gestión empresarial. «Lo más importante es tener el propósito claro para que todos los que trabajamos en JO tengamos una misma alineación«, señala Ortíz. Este propósito ha sido fundamental para mantener el enfoque y la dirección de la marca a lo largo de los años.
La apertura en Nueva York no solo representa un logro significativo en su carrera, sino también una oportunidad para llevar su marca a un público más amplio y diverso. En esta entrevista exclusiva, Johanna comparte su visión detrás de esta expansión estratégica, los valores que guían su trabajo y las innovaciones que planea introducir para mantener la marca Johanna Ortíz en la vanguardia de la moda global.