Desde que hace unas semanas el mismo Dries Van Noten anunciara su salida de la firma de nombre homónimo que fundó hace más de 40 años, las especulaciones sobre quién será su sucesor no han dejado de sucederse. Sin confirmación todavía sobre la persona que tomará las riendas de la dirección creativa de la firma, sí se sabe que la noticia del nombramiento coincidirá con la última colección del diseñador, ambos acontecimientos tendrán lugar en junio.
“Me he estado preparando para este momento desde hace un tiempo y siento que es hora de dejar espacio para que una nueva generación de talentos aporte su visión de la marca”, fue la razón que dio Dries Van Noten para anunciar su retirada. Dejar paso a las nuevas generaciones de diseñadores, mucho más actualizados en las tendencias y gustos del momento, es el motivo por el que a Dries Van Noten le ha llegado el momento de despedirse, aunque ha confirmado en el mismo comunicado emitido en sus redes sociales que no se retirará del todo, ni de manera inmediata, de las decisiones vinculadas con su firma. Algo que tampoco hizo en 2018 cuando el grupo Puig se hizo con la mayor parte de la empresa, aunque en aquel momento una de las cláusulas era mantenerse él al frente de la dirección creativa.
Seis años después las cosas han cambiado. Dries Van Noten sale y todas las miradas se dirigen a Meryll Rogge como su posible sucesora en el cargo.
Licenciada en moda por la Real Academia de Bellas Artes de Amberes, se incorporó al equipo de Marc Jacobs, en Nueva York, a un año de terminar la carrera. Tras seis años trabajando mano a mano con el diseñador estadounidense en las colecciones femeninas, donde ella misma asegura haber aprendido el abecedario del negocio, volvió a Europa en el año 2015 para ser la jefa de diseño de mujer en Dries Van Noten. Ahí comenzó una relación profesional que derivó en una de amistad que se mantuvo en los años. A su lado aprendió creatividad y la forma tan minimalista de trabajar, dos consideraciones que le han dado la buena fama al diseñador y que llamó la atención de Rogge por estar entre los favoritos de la industria a nivel internacional siendo dueño de una marca independiente.
Con Dries Van Noten trabajó durante tres años hasta que decidió ser freelance para poder colaborar con más marcas y seguir añadiendo experiencia a su trayectoria profesional. Entre ellas, también estaba Dries Van Noten y Marc Jacobs, sus dos mentores.
Meryll Rogge, cita obligada en Paris Fashion Week
Tres años de independencia profesional que le sirvieron para preparar el lanzamiento de su propia marca, que vio la luz en febrero de 2020 y ya forma parte del calendario oficial de Paris Fashion Week, además de haber recibido el Premio de la Moda Belga para Diseñador Emergente en 2021 y haber sido nominada para el Premio LVMH 2022.
Meryll Rogge ya es sinónimo de innovación. Forma parte de los miembros de esa generación que llegaron a la moda para romper sus moldes y dar nuevas visiones de diseño al sector. Su creaciones son una evolución natural de los logros y ambiciones que ya manifestó con esa decisión de dejarlo todo e irse a Nueva York a aprender de Marc Jacbos. Y fueron aquellos aprendizajes los que convencieron a la creativa a dar el paso definitivo con su marca homónima, la cual situó en Bélgica, cerca de su ciudad natal, Gante.
Desde Meryll Rogge la propuesta es firme y evidente a la vista: un armario contemporáneo impregnado de asociaciones sorprendentes, con piezas clásicas reinterpretadas con un inesperado sentido de la belleza. Simplicidad en moda masculina y exquisita sofisticación del evening wear y de la opulencia decorativa en la línea femenina. Una sofisticación fuerte y audaz de la feminidad como principio creativo, precisamente por la firme creencia en las cualidades perdurables, en forma y materiales, que defiende la marca. Atemporalidad necesaria que permite hablar de creaciones actuales de verdadero amor por el pasado, su apuesta es vintage. Tal y como pronunció en una ocasión el ya desaparecido Virgil Abloh: «El futuro de la moda será vintage o no será».
La idea de crear diseños que definan a la mujer libre es un ademán adquirido del método de trabajo de Dries Van Noten, de aquellos años que pasó junto a él aprendiendo y creando para una mujer que tiene un futuro prometedor por delante, de estilo basado en la calidad y la apuesta por los colores, con propuestas independientes. Diseños que ya han conquistado a algunas mujeres por todos conocidas como Hailey Bieber, Demi Lovato y Kathryn Gallagher (Gossip Girl), entre otras.
Una vacante y mucho sentido común
Meryll Rogge aglutina una trayectoria profesional asentada en la independencia creativa, aprendida de sus dos grandes mentores y trabajada a diario con diseños atemporales, con referencias a los archivos y motivada por un estilo que respire color y calidad, por la minuciosidad en la elección de materiales y el proceso de creación. Por todo ello, y por esos años que pasó junto a Dries Van Noten, primero como Jefa de Diseño de las colecciones femeninas y después como colaboradora amiga de la marca, la elección de Meryll Rogge como directora creativa de Dries Van Noten coge la fuerza necesaria como para que esta sucesión sea la más lógica que tome la marca belga.
Rogge conoce los códigos, comparte filosofía de trabajo –la aplicó en su propio proyecto en solitario– y su imaginario creativo comparte lenguaje con el que una vez fue su jefe. ¿Por qué no iba a dejar Dries Van Noten su marca en manos amigas?