Sophie et Voilà nace de la unión de dos mujeres diametralmentre opuestas, pero complementarias, cuya filosofía se basa en que «juntas somos mejores». Ellas son, Sofía Arribas y Saioa Goitia.
La primera de ellas –arquitecta de profesión y ligada al mundo de la moda desde su infancia– funda la marca en 2010, como oportunidad para hacer proyectos de arquitectura a pequeña escala en forma de tocados, sombreros y prendas. Un tipo de piezas que, bien por estilo o calidad, no se podían encontrar en tienda. La segunda, Saioa Goitia, se une al proyecto unos años más tarde con la idea de revolucionar el potencial de este atelier en el centro de Bilbao –ciudad natal de la firma–.
La llegada de Goitia en 2016 tuvo una intención muy desarrollada: convertir la firma que diseñaba y confeccionaba prendas exclusivas y únicas en una empresa que presentara colecciones en 26 países. «Ella fue la clave en la transformación de la creatividad y la artesanía en una empresa internacional», aclara Sofía Arribas, fundadora y directora creativa de Sophie et Voilà, quien sólo tiene elogios para Goitia, cofundadora y CEO de la marca.
Ambas mujeres han hecho de esta firma made in Spain un claro referente de estilo y confianza a la hora de vestir. Del equilibrio de ambas empresarias nace una empresa que pretende acompañar a cada mujer y animarla a expresar su propia personalidad a través de piezas hechas a medida. El poder de la mujer elevado a la máxima potencia, ya que todo el equipo de la marca está formado por mujeres que diseñan, gestionan y fabrican juntas desde las instalaciones de Bilbao, representando dos importantes valores de Sophie et Voilà: el éxito del trabajo compartido y el cuidado por el bienestar del planeta, ya que acortando distancias y evitando el transporte de materiales innecesarios y contaminados contribuyen a hacer de este mundo un lugar mejor.
Por esta última razón, la sostenibilidad se abre paso de manera patente en la firma. Según sus responsables, «este valor permanece intacto en la empresa desde su fundación en 2010, junto a al artesanía y la apuesta femenina, lo único que hemos hecho ha sido adaptarlos a cada paso que hemos dado. Siempre hemos querido mantener el espíritu del atelier, de la confección y el diseño exclusivo, porque es nuestro origen y bebemos de la experiencia de nuestras clientas». Y continúan: «Y de esas experiencias nacen las colecciones que se confeccionan sólo bajo pedido y con tejidos sostenibles».
Unas colecciones que, en la actualidad, han dado la vuelta al globo y ya están presentes en más de 90 puntos de venta. Según la CEO de la marca, este éxito se ha conseguido con mucho trabajo: «Además de la combinación de las artes y pasiones de ambas que derivan en trabajar hasta la extenuación, es importante saber el rol de cada una. Sofía es la creatividad y la filosofía, mientras que yo soy la cabeza y la estrategia. Esa es nuestra receta, la de admirarnos y respetarnos».
Sólo con respeto y admiración se llega a ser las mujeres que lideran una marca que se define como «una marca de novias centrada en siluetas minimalistas que confecciona para mujeres versátiles, elegantes y modernas» que hoy también está a la cabeza de las firmas que ofrecen piezas para invitadas, por otro lado, un mercado en estado de expansión. «Aunque de todos los diseños a medida que salen del atelier, los de invitadas supongan sólo un 8% de nuestra producción, lo cierto es que con el lanzamiento de la colección ready to wear [RTW] esperamos que, a medio plazo, supere ampliamente la producción de vestidos de novia en el mercado internacional», señalan las dos directivas. Esto supone que las novias siguen siendo la clientela principal de la Casa, dentro y fuera de nuestro país. Tanto para novias como para invitadas, todas las piezas de Sophie et Voilà están acariciadas por un velo quiet luxury, tan versátiles que puedes ser vestidas como prendas de uso diario que en ningún momento pierden detalle o delicadeza.
Puede que en esa, llamémoslo ‘exclusividad versátil’ también radique parte del éxito de estas empresarias al frente de Sophie et Voilà. Así lo avalan Nueva York, Tokio o Barcelona, convertidas ya en citas fijas en las presentaciones de las propuestas de la firma; y aclara Goitia que «el salto responde a una estrategia de crecimiento internacional, tanto físico como digital, que llevamos desarrollando cuatro años, y con la que queremos mantenernos a la cabeza de las firmas nicho de moda nupcial y ampliar el espectro hacia ese colección ya mencionada, la RTW [con la que pretenden llegar a un mayor público y que ya ha sido presentada en París]».
Sabedoras de que lo importante no es entrar en el negocio sino mantenerse, ambas socias aseguran que cuando llegaron al sector estaba todo por hacer en su nicho de mercado, pero «hoy todo ha cambiado y es difícil diferenciarse por tipología de producto o por precio. Lo que seguimos potenciando es el alma, el diseño y la filosofía de firma como estrategia. Ser fiel a cada uno de esos puntos es lo que da credibilidad a una firma de moda». Esto y que creer en un atelier como sinónimo de escucha al cliente es un valor en la industria de la moda. Ellas están orgullosas de llevarlo en el ADN.