La actriz trasciende ahora el mundo de la ficción para ponerse en el papel de directora creativa y/o experimentar en torno el acto de vestir mediante la creación de una marca de código abierto y ético llamada “Atelier Jolie”.
«Hoy empiezo algo nuevo: un colectivo en el que todo el mundo puede crear… Atelier Jolie es un espacio para que los creadores colaboren con una familia experta y diversa de sastres, patronistas y artesanos de todo el mundo. Nace de mi aprecio y profundo respeto por los muchos sastres y modistas con los que he trabajado a lo largo de los años, de un deseo de aprovechar el material vintage de alta calidad y el material desechado que ya existe, y también de unirme a un movimiento que fomente la expresión personal», publicó ayer la icónica intérprete en su cuenta de Instagram, anunciando el lanzamiento de la marca.
Angelina está construyendo así un espacio colaborativo en el que sastres, patronistas o artesanos puedan expresarse de manera libre y creativa. Un colectivo de la moda que, más allá de todos esos valores, represente y apoye el trabajo de las personas refugiadas y otras comunidades artísticas con grandes talentos infravalorados.
ENTRE EL MINIMALISMO Y EL UPCYCLING
La identidad de Jolie se entreteje en este nuevo sello que aborda las nuevas dinámicas que se le exigen al negocio indumentario, como la sostenibilidad, el upcycling y el uso del deadstock. Una expresión eco-futurista que canaliza la moral y la ética de la actriz mediante la recuperación de prendas antiguas y la creación de nuevos diseños a partir de tejidos excedentes, con el fin de que no acaben muriendo apilados en cementerios textiles. “Podrás reparar o reciclar piezas de tu armario que quieras recuperar, perfeccionar el ajuste, dar nueva vida a lo que podría haberse desechado y crear prendas de calidad con un significado personal», reza la filosofía de la marca.
El universo de «Atelier Jolie» expondrá todo un archivo de piezas monocromáticas, minimalistas y atemporales, en sincronización estética con el estilo de la actriz, construidas por esa comunidad de expertos de todo el mundo que experimentarán colectivamente con el arte del diseño. “Destacaremos a las personas que participan en cada creación. Reuniremos a un equipo diverso, que incluirá puestos de aprendizaje para refugiados y otros grupos con talento e infravalorados, con puestos dignos basados en la destreza. Y al trabajar con artesanos y creadores de todo el mundo, esperamos ayudar a compartir la riqueza de su patrimonio cultural y apoyar el desarrollo de sus propias empresas».