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Kim Kardashian tiene un nuevo negocio (y no tiene que ver con la moda)

FORBES calcula que Kim Kardashian cuenta con un patrimonio valorado en 1.800 millones de dólares gracias, en gran parte, a sus participaciones en sus empresas KKW Beauty y Skims.

Kim Kardashian, multimillonaria gracias a sus marcas de belleza y de ropa, amplia su imperio empresarial con el lanzamiento de una firma de capital riesgo.

La influencer y Jay Sammons, exjefe de Consumo, Medios de Comunicación y Venta al por menor de Carlyle, han informado por primera vez al Wall Street Journal sobre la puesta en marcha de SKKY Partners, un nombre que sale de un juego de palabras con las iniciales de Kardashian.

Sammons también comentó con el periódico que la madre de Kardashian, Kris Jenner, será socia de la empresa, pero no especificó el tamaño previsto del fondo ni el nombre de otros inversores.

SKKY planea invertir en empresas de productos de consumo, digitales y de comercio electrónico, de medios de comunicación, de hostelería y de lujo, ha explicado la firma en un post de Instagram.

Sammons, que este verano dejó Carlyle, una de las mayores empresas de capital privado del mundo, supervisará las operaciones de SKKY, según recoge el medio de comunicación.

Mujer empresaria

FORBES calcula que Kim Kardashian cuenta con un patrimonio valorado en 1.800 millones de dólares gracias, en gran parte, a sus participaciones en sus empresas KKW Beauty y Skims.

Por primera vez FORBES incluyó a Kardashian en el selecto grupo de multimillonarios en abril de 2021, hace apenas año y medio.

Kardashian es una de los empresarios adinerados de su familia: la fortuna de su exmarido Kanye West rondaría los 2.000 millones de dólares, mientras que la de sus hermanastras Kylie Jenner y Kris Jenner oscilaría en torno a los 600 y los 230 millones de dólares, respectivamente.

El éxtio de KKW Beauty y Skims

Kim Kardashian es la última celebrity en lanzar su propia firma de capital privado o capital de riesgo. Antes lo hicieron otros reconocidos nombres como el rapero Jay-Z, el actor Ashton Kutcher y los atletas Serena Williams y Kevin Durant.

La estrella de la telerrealidad ha sabido aprovechar su fama para conseguir numerosos y lucrativos contratos de patrocinio y lanzar sus empresas de belleza –KKW Beauty– en 2017 y la marca de ropa –Skims– en 2019.

Tal ha sido el éxito de las firma de moda que una ronda de financiación de enero valoró Skims en 3.200 millones de dólares, lo que hace que la participación estimada de Kardashian del 35% de la compañía tenga un valor de más de 1.000 millones de dólares.

Por otro lado, la influencer anunció el cierre de KKW Beauty el pasado mes de julio, explicando que planeaba cambiar de marca.

En junio, lanzó una línea de cuidado de la piel de alta gama, SKKN By Kim, la aparente sucesora de KKW Beauty, en colaboración con Coty, que compró una participación del 20% de la nueva marca en 2020 por 200 millones de dólares.

«Baby Bar», aprobado

El pasado mes de diciembre, Kardashian anunció que había aprobado el examen «Baby Bar» de California, una prueba obligatoria para los aspirantes a abogados que no asisten a escuelas de derecho acreditadas.

Kardashian, cuyo padre Robert Kardashian fue un abogado defensor que representó a O.J. Simpson en su juicio por asesinato, es aprendiz en un bufete de abogados de San Francisco.

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