Compuesto por un equipo coral que refleja la transformación del sector jurídico, Deloitte Legal, proyecto liderado por Enrique Gutiérrez, se posiciona con una convicción clara: ofrecer un asesoramiento jurídico que trascienda lo convencional. En un mercado cada vez más competitivo, la firma se consolida como una de las grandes referencias en la intersección entre Derecho, negocio y tecnología.
Deloitte Legal ha sabido diferenciarse combinando la excelencia técnica con una mirada estratégica y sectorial. La firma no se limita a ofrecer soluciones jurídicas o fiscales, sino que aprovecha el conocimiento transversal del ecosistema Deloitte, donde confluyen el asesoramiento financiero, la consultoría estratégica y las capacidades tecnológicas. “Nos apoyamos en las fortalezas de una firma multidisciplinar que permite ir más allá del asesoramiento tradicional y ofrecer respuestas adaptadas a los retos reales de nuestros clientes”, señalan desde la dirección. Esta visión global se ve reforzada por la pertenencia a una red que permite acompañar a las empresas en su expansión y asegurar una cobertura homogénea en distintas jurisdicciones.
La firma se estructura en cuatro grandes áreas de actuación que concentran su propuesta de valor. En Fiscal, el despacho busca consolidar su liderazgo en materias como Tax Controversy, precios de transferencia o tributación internacional. “Ofrecemos una propuesta diferencial de alto valor, por nuestras capacidades integradas y de digitalización”, destaca Willy de Molina, socio de Fiscal, para quien la tecnología aplicada al ámbito fiscal será una de las claves de competitividad en los próximos años.
El área Legal refuerza su papel como asesor jurídico de referencia en el ámbito regulatorio, con foco en los sectores bancario y energético y una fuerte apuesta por el cumplimiento normativo. Además, el plan estratégico potencia nuevas líneas que marcarán el futuro del mercado legal: Digital, orientada a los retos regulatorios de la transformación tecnológica (IA, ciberseguridad o protección de datos); M&A, con un enfoque endto-end que integra todas las fases del ciclo transaccional; y People Law, que abarca desde el derecho laboral y la sostenibilidad social hasta los desafíos de la diversidad y la IA en las relaciones laborales. A estas áreas se suman Mobility & Compensation, especializada en políticas de movilidad geográfica y remuneraciones de consejeros y directivos, y Business Process Solutions, que combina capacidades tecnológicas con la externalización de procesos administrativos, financieros y legales.
Ser una firma multidisciplinar nos permite ir más allá del asesoramiento tradicional y ofrecer respuestas adaptadas
El talento es otro de sus pilares estratégicos. La firma considera a sus profesionales como su principal activo y dedica una atención especial al desarrollo de modelos formativos basados en la especialización y el aprendizaje continuo. Deloitte Legal promueve políticas de conciliación, bienestar y meritocracia, impulsando una cultura que equilibra la excelencia técnica con el crecimiento personal y sostenible. La apuesta está dando frutos: este año, Deloitte fue elegida “Mejor Empresa para trabajar” tanto por Forbes como por Actualidad Económica/El Mundo. “La apuesta por nuestro talento interno se ha reflejado en la promoción de siete nuevos socios y 13 directores. Además, la puesta en marcha de nuestro nuevo plan estratégico, centrado en áreas de gran potencial, permite atraer a talento senior cualificado, que se ha materializado en la incorporación de cuatro nuevos socios con una sólida trayectoria profesional”, explica Enrique Gutiérrez.
La tecnología, integrada en el ADN del despacho, actúa como catalizador de eficiencia y palanca de innovación. Deloitte Legal ha incorporado IA generativa en sus procesos internos y colabora con partners tecnológicos para desarrollar agentes inteligentes capaces de mejorar la gestión del conocimiento. “A través del respaldo financiero y operativo de nuestra red global, podemos realizar inversiones muy significativas en plataformas y herramientas innovadoras que optimizan nuestra operativa interna.
Como resultado, hemos conseguido impulsar enormemente nuestra capacidad de respuesta y productividad, dedicando más tiempo de nuestros profesionales a tareas de mayor valor”, subraya Enrique Gutiérrez.
De cara al futuro, la firma identifica varios retos clave. El primero, la creciente complejidad regulatoria a escala internacional, que obliga a las empresas a navegar entre marcos legales diversos y en constante evolución. En este contexto, la capacidad de anticipación y la actualización permanente son esenciales para mantener la ventaja competitiva. “Vivimos una rápida evolución del mercado, impulsada por la aparición de nuevas normativas en ámbitos como la regulación tecnológica, el gobierno corporativo o la fiscalidad internacional. Nos exige reforzar constantemente nuestras capacidades legales y tecnológicas para anticiparnos a las necesidades del cliente y seguir ofreciendo soluciones diferenciales”, afirma Begoña Fernández, socia de Legal y reconocida “Mejor Abogada” en la última edición de los Premios Forbes Best Lawyers.
La transformación tecnológica seguirá marcando el ritmo del sector. Deloitte Legal es consciente de que el futuro pasa por conjugar sus principios de exigencia profesional con la capacidad de innovación, impulsando nuevos offerings y fortaleciendo las habilidades humanas que generan confianza y valor en la relación con el cliente. De acuerdo con la dirección del despacho, un desafío será mantener la excelencia técnica mientras se incorporan las herramientas que definirán la abogacía del mañana.
