CaixaBank obtuvo hasta marzo un beneficio atribuido sin extraordinarios asociados a la fusión con Bankia de 514 millones de euros, frente a los 90 millones registrados en el mismo periodo de 2020 y afectados por las provisiones constituidas para anticiparse a impactos futuros asociados a el covid-19.
La entidad formalizó a finales de marzo el proceso de fusión con Bankia, consolidando su liderazgo en el sistema financiero español, ya que tras la operación supera los 663.000 millones de euros en activos y presta servicio a 21,1 millones de clientes en España y Portugal.
La cuenta de resultados de CaixaBank en el primer trimestre no incluye los resultados generados por la actividad de Bankia en el periodo, ya que la operación se cerró a final de marzo, por lo que en ese sentido la fusión no ha tenido ningún impacto en las distintas líneas de actividad. Sin embargo, el balance sí refleja la incorporación de activos y pasivos de Bankia a su valor razonable a fecha de 31 de marzo, que es la fecha que se ha tomado como referencia de la fusión a efectos contables.
Se dispara el beneficio tras la fusión con Bankia
Tras la incorporación del patrimonio neto de Bankia, la cuenta del Grupo CaixaBank refleja un apunte extraordinario asociado a la fusión (fondo de comercio negativo) de 4.300 millones de euros, que unido a los gastos extraordinarios de la integración y al resultado ordinario da lugar a un beneficio atribuido contable en el primer trimestre de 4.786 millones.
El fondo de comercio negativo es fruto de descontar del patrimonio neto de Bankia (13.088 millones de euros) el precio de adquisición pagado por la entidad presidida por José Ignacio Goirigolzarri y dirigido por Gonzalo Gortázar, (5.314 millones de euros) y una serie de ajustes contables al poner a valor razonable diferentes activos y pasivos (3.474 millones de euros).
El resultado sin tener en cuenta el efecto de los extraordinarios de la integración de Bankia se sitúa en 514 millones de euros, de los que 444 millones de euros corresponden a la actividad bancaria y de seguros, 58 millones proceden de la entidad portuguesa BPI, y 12 millones, de participaciones.
Incremento de los ingresos core y reducción de gastos
Los ingresos core de CaixaBank –sin integrar en el periodo la actividad de Bankia– alcanzan 2.066 millones de euros a cierre del primer trimestre, con un incremento del 1% en tasa interanual.
Por su parte, en un entorno de tipos negativos, el margen de intereses se reduce un 0,7%, hasta 1.191 millones de euros, una caída que se ve compensada por los ingresos por contratos de seguros (+9,3%), los resultados asociados a participadas aseguradoras (+39,2%) y el crecimiento de las comisiones (+0,2%).
El margen bruto se sitúa en 2.063 millones de euros, un 4% más, gracias a la mejora de los resultados de operaciones financieras, que alcanzan 42 millones de euros, y cuya evolución viene marcada, esencialmente, por el impacto negativo en 2020 de la valoración del riesgo de crédito de los derivados financieros.
Los ingresos de la cartera de participadas crecen un 34,4% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, hasta 77 millones de euros, esencialmente, por la mejora del resultado atribuido de SegurCaixa Adeslas, impactado en el mismo trimestre del ejercicio anterior por la valoración de activos.
Mientras, los gastos de administración y amortización recurrentes se reducen un 3,3% en tasa interanual, hasta 1.149 millones de euros, una caída que se debe a los ahorros asociados a las prejubilaciones de 2020, a la gestión de la base de costes y a menores gastos incurridos en el contexto de la Covid-19. La entidad ha registrado entre enero y marzo gastos extraordinarios asociados a la integración de Bankia por importe de 40 millones de euros.
Sin tener en cuenta el impacto de los extraordinarios de integración, el ratio de eficiencia del Grupo se sitúa en el 53,5% y la rentabilidad (ROTE) alcanza el 8%.
Cuenta de resultados proforma
Si se realiza la agregación de las cuentas de resultados de CaixaBank y de Bankia, el resultado proforma sin extraordinarios asociados a la fusión sería de 580 millones de euros, frente a los 184 millones del primer trimestre del pasado año.
El margen de intereses se situaría en 1.639 millones de euros, lo que supone un 1,3% menos que en el mismo periodo del año anterior, en tanto que los ingresos core proforma de ambas entidades se incrementarían un 0,7% en tasa interanual, hasta 2.808 millones de euros. En concreto, los ingresos por comisiones alcanzarían 941 millones, con un alza del 1,6%. Por su parte, el margen bruto proforma se situaría en 2.774 millones de euros (+0,5%) y los gastos de administración y amortización recurrentes se reducirían un 2,6%, hasta 1.593 millones.
Morosidad y cobertura se mantienen estables
Por otra parte, el saldo de dudosos, sin tener en cuenta la integración de Bankia, se mantuvo prácticamente estable en el periodo, con 8.650 millones de euros. Teniendo en cuenta el conjunto del balance de la sociedad integrada, este saldo asciende a 14.077 millones de euros.
De esta manera, la ratio de morosidad se sitúa en el 3,6% (un 3,3% sin contar Bankia) y la ratio de cobertura se mantiene en el 67%. Además, el coste del riesgo (últimos 12 meses) se sitúa en el 0,61%.
Evolución de la liquidez y el capital
Entre enero y marzo, la entidad ha reforzado sus niveles de liquidez y solvencia. Los activos líquidos totales se sitúan en 147.146 millones de euros, con un crecimiento de 32.695 millones de euros en el primer trimestre, debido principalmente a la integración de Bankia.
Así, el Liquidity Coverage Ratio del Grupo (LCR) a 31 de marzo de 2021 es del 309%, mostrando una holgada posición de liquidez (273% LCR media últimos 12 meses), muy por encima del mínimo requerido del 100%. Además, la entidad cuenta son una sólida estructura de financiación minorista, con una ratio loan to deposits del 97%.
En cuanto a la evolución del capital, la ratio Common Equity Tier 1 (CET1) se sitúa en el 14,1%. En el primer trimestre se recoge el impacto extraordinario de la integración de Bankia de +77 puntos básicos y -89 puntos básicos por el efecto de la asignación del precio pagado (PPA).