Junto con su novio Cliff Obrecht, Melanie comenzó a editar anuarios escolares y a idear nuevos proyectos. Aseguraba en ‘Forbes emprende’ de Spainmedia Radio que emprender sin experiencia es la clave, ya que cometer errores te lleva a escalar y hacer crecer una compañía rápidamente. Y así ocurrió con Canva. Tras un año de buscar contactos, en 2011 encontraron un inversor estadounidense que hizo que el proyecto se pusiese en marcha tan solo un año después.
Poco a poco, su empresa ha ido creciendo considerablemente gracias a su tesón y el de sus compañeros Cliff Obrecht y Cameron Adams, y han conseguido expandirse a 179 países de todo el mundo en los que los usuarios han creado ya 90 millones de diseños en la plataforma. Los consejos que da la joven empresaria a todo aquel que quiera montar un negocio son: superar el rechazo, disfrutar los retos para superar mejor las adversidades y arriesgarse a empezar algo, pues solo así se llega a alcanzar el éxito.