Igualmente, el beneficio neto de explotación se rebajó un 21%, hasta los 1.096 millones de euros, precisamente en un periodo en que las ventas supusieron una subida del 5%, hasta los 9.713 millones de euros. Según el informe realizado pro la cadena sueca, las razones que han condicionado el mencionado balance se hallan principalmente en el incremento de los costes como consecuencia de factores clave como el descenso de precios o el encarecimiento del dólar.
Siguiendo las palabras del director ejecutivo, Karl-Johan Persson, este ha sido un semestre realmente exigente dentro del sector textil en casi todos los mercados, pero aún así tienen confianza en el futuro cercano, sobre todo a vistas de las nuevas tiendas que abrirán próximamente (en Nueva Zelanda, Chipre o Colombia) y de la ampliación a otros países (Eslovenia, Letonia, Irlanda o Japón, entre otros) de su servicio de venta por internet.