Siete frases que hacen que parezca que tienes (aún) menos experiencia
Todos hemos tenido un primer trabajo en el que nos hemos sentido más jóvenes y mucho más inexperimentados que el resto. El problema es que, a menudo, ese sentimiento de cierta inferioridad nos hace actuar y hablar de manera que evidenciamos todavía más nuestra falta de experiencia. ¡Fuera inseguridades! Si te han contratado para el puesto es porque eres tan válido como cualquier otro.
Siete frases que hacen que parezca que tienes (aún) menos experiencia
1. “No lo sé”
No tienes que tener todas las respuestas siempre. Nadie las tiene. Pero responder a tus compañeros de trabajo “no lo sé” demasiadas veces puede hacer que parezca que no tienes lo que hay que tener para el puesto. ¿Alternativas? “Eso es justo lo que me estaba preguntando. Voy a buscar la respuesta”.
Siete frases que hacen que parezca que tienes (aún) menos experiencia
2. “Tengo que preguntarle a mi jefe”
Sea cual sea el nivel en el que está tu carrera, siempre va a haber cosas que tengas que consultar con tu superior. Pero eso no significa que debas terminar cada conversación haciéndole saber a los demás que no eres tú quien toma la decisión final. ¿Alternativas? “Todo lo que dice suena muy bien, deje que lo hable con otras personas de mi equipo antes de seguir adelante”.
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3. “¿Está bien así?”
Esta pregunta denota altas dosis de inseguridad, y hace que parezca que no tienes ni idea de si tu recomendación es buena o no. ¿Alternativas? “Hágame saber cuando pueda cuál es el siguiente paso”.
Siete frases que hacen que parezca que tienes (aún) menos experiencia
4. “Es que soy el [inserte becario/junior/nuevo empleado]”
Si el nombre de tu puesto de trabajo no es demasiado impresionante no hace falta que se lo repitas a todo aquél con el que hables. ¿Alternativas? “Trabajo en el departamento de Márketing de esta compañía, y me pongo en contacto con usted porque…”.
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5. “Extremadamente”, “excesivamente”, “increíblemente”
Una regla básica de la correspondencia digital en materia de negocios es eliminar todos aquellos adverbios y adjetivos innecesario de tus emails, no sólo por cuestiones de economía del lenguaje y tiempo, sino también porque este tipo de palabras suelen denotar emociones en un tipo de comunicación que debe ser lo más aséptica posible.
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6. “Hola, soy María”
En un contexto social es perfectamente normal que te presentes a ti mismo con tu nombre de pila. Sin embargo, en un ambiente profesional o de networking hace que parezcas más inexperimentado. ¿Alternativa? “Hola, soy María Gutiérrez, del departamento de márketing”.
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7. “Estoy disponible el día y la hora que mejor le venga”
¿De verdad? ¿Lo estás? Si es así, ahórrate esta frase: te hará parecer desesperado o, lo que es peor, desocupado y carente de toda vida social o profesional. ¿Alternativa? “Me vendría bien reunirnos el martes o jueves por la tarde, aunque soy flexible”.
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