GILMAR da el salto definitivo al mercado internacional con su incorporación como socio estratégico a Bonita Beach Luxury Residences, un ambicioso desarrollo inmobiliario del Family Office de la familia Carrascosa —fundadores de Legálitas— en Cap Cana (República Dominicana). La iniciativa, presentada en un exclusivo evento en Pozuelo de Alarcón y protagonista en SIMED, marca el inicio de la actividad global de la inmobiliaria española y refuerza la apuesta del grupo por el Caribe como destino de inversión internacional.
El proyecto, concebido para el inversor global, combina ubicación estratégica, arquitectura contemporánea y ventajas fiscales altamente competitivas. Bonita Beach incluye 559 residencias de entre 84 y 447 m², todas con terrazas panorámicas, family room y habitación de servicio, además de 19 villas exclusivas. El diseño lleva la firma de GVA Arquitectos y la ejecución corre a cargo de TLDI, responsables de proyectos emblemáticos en República Dominicana.
Cap Cana, uno de los enclaves más exclusivos del Caribe, aporta un entorno privilegiado: playas vírgenes, campos de golf diseñados por Jack Nicklaus, una marina de primer nivel y hoteles de cinco estrellas como St. Regis, Eden Roc o Sanctuary. Además, se encuentra a solo 15 minutos del Aeropuerto Internacional de Punta Cana, un factor clave para compradores de Estados Unidos, Europa y Latinoamérica.
Vida de resort, tecnología sostenible y ventajas fiscales
Entre sus principales atractivos, el complejo contará con una playa privada artificial de 15.000 m² desarrollada con tecnología Crystal Lagoons, un rooftop con vistas 360°, gimnasio panorámico, spa, beach club, canchas de pádel, parque infantil y múltiples áreas sociales. La tecnología Crystal Lagoons garantiza un bajo consumo de agua y energía, además de una monitorización continua para mantener un entorno seguro y saludable.
Desde una perspectiva inversora, Bonita Beach se acoge a la Ley CONFOTUR, que incluye exenciones como la eliminación del IPI durante 15 años y la exención del impuesto de transferencia. Además, los propietarios podrán adherirse a un programa de gestión de alquiler vacacional operado por una firma internacional, lo que les permite generar rentabilidad sin asumir la gestión directa.
El papel de GILMAR en la operación
La entrada de GILMAR representa un movimiento estratégico decisivo. Con más de 40 años de trayectoria, la compañía aporta su extensa red de clientes, su experiencia en marketing de lujo y su capacidad de gestión en operaciones de alta exigencia. Su incorporación garantiza una comercialización profesional, transparente y enfocada a un público que busca calidad, rentabilidad y seguridad en la inversión.
Con precios desde 290.000 euros y una entrega prevista para finales de 2028, Bonita Beach Luxury Residences aspira a convertirse en un nuevo referente del lujo en el Caribe, combinando playa privada, mar y golf en un enclave único y ofreciendo una propuesta sólida para inversores que buscan exclusividad, seguridad y rentabilidad.