Aunque parezca increíble, han pasado 20 años desde que el euro conquistó el Viejo Continente y 18 desde que se convirtió en la moneda oficial y única para la eurozona. Desde entonces, en los hogares españoles hay unos 1.600 millones de euros en pesetas sin canjear y el 31 de diciembre perderán su valor para siempre.
Por ello, la Fundación Pasqual Maragall, con el apoyo del Grupo Masmóvil, lanza la campaña “La última misión de la peseta” con el objetivo de recaudar antiguas monedas y destinarlas a proyectos de investigación contra el Alzheimer.
La iniciativa busca dar una última y solidaria oportunidad a las pesetas y conectar con las personas que han convivido con esta moneda para recuperar los recuerdos nostálgicos.
Para canjearlas, las pesetas podrán ser depositadas desde el 1 de julio y hasta final de año en las huchas disponibles en las tiendas Yoigo y las tiendas multimarca MASlife. En total habrá más de 800 puntos de recogida repartidos en las comunidades autónomas.
Asimismo, qquellas personas que quieran contribuir en la lucha contra el Alzheimer pero no dispongan de pesetas, podrán realizar donaciones.