OHLA ha dado un paso decisivo en su estrategia internacional con la adjudicación de un contrato valorado en 850 millones de euros para la concesión, mejora y mantenimiento de un tramo clave de la autopista BR-040 en Brasil. El proyecto, que abarca 218,9 kilómetros de carretera, ha sido otorgado a un consorcio liderado por la constructora española junto con la brasileña Construcap y la también española Copasa.
El contrato, promovido por la Agencia Nacional de Transportes Terrestres (ANTT), contempla una concesión a 30 años, lo que garantizará la operación y conservación de una infraestructura vital para las conexiones entre los estados de Río de Janeiro y Minas Gerais. Esta ruta es una arteria fundamental tanto para el transporte de mercancías como para la actividad turística en el sureste brasileño.
Un proyecto con alto impacto económico y social
La envergadura del contrato no solo destaca por su volumen económico, sino también por su potencial generador de empleo. Se estima que su ejecución movilizará más de 130.000 puestos de trabajo directos e indirectos, dinamizando sectores como la construcción, la ingeniería y los servicios logísticos.
Uno de los puntos más ambiciosos del plan será la culminación de la subida de la Sierra de Petrópolis, una obra técnicamente compleja que ha sido reclamada durante años por su papel en la mejora de la seguridad vial y la reducción de tiempos de tránsito en la zona.
El inicio de operaciones está previsto para el segundo semestre de 2025, una vez se completen las fases iniciales de rehabilitación y acondicionamiento de la vía.
Regreso estratégico al mercado brasileño
Este contrato supone un regreso con fuerza de OHLA al mercado de concesiones brasileño, del que se retiró en 2012 tras vender su participación a Abertis y Brookfield. Más tarde, en 2017, la antigua OHL se deshizo de su división de concesiones globales en una operación de más de 2.200 millones de euros con el fondo australiano IFM.
Sin embargo, la compañía ha vuelto a mirar hacia Latinoamérica como un motor clave para su crecimiento. En 2024 ya había dado señales claras de esta apuesta con la adjudicación del tranvía metropolitano de Salvador de Bahía, por un valor aproximado de 140 millones de euros.
Además de Brasil, OHLA mantiene operaciones activas en Chile, México, Perú, Panamá y Colombia, con proyectos que abarcan desde infraestructuras hospitalarias hasta grandes obras de ingeniería hidráulica y transporte urbano.
Financiamiento y visión a largo plazo
Esta adjudicación llega en un momento en que OHLA trabaja para reforzar su estructura financiera, tras verse afectada por una reciente salida de caja de casi 40 millones de euros relacionada con un contrato en Kuwait. La empresa prepara actualmente una ampliación de capital de 50 millones, de la cual ya tiene comprometido el 40% gracias al respaldo del grupo Amodio y del empresario mexicano Andrés Holzer.
Este impulso financiero será clave para sostener la ejecución de grandes contratos internacionales como el de la BR-040, y posiciona a OHLA nuevamente como un actor relevante en el desarrollo de infraestructuras en América Latina.
Con esta operación, la compañía no solo fortalece su cartera, sino que demuestra una estrategia clara: volver a liderar concesiones de largo plazo en mercados emergentes con alto potencial de retorno y desarrollo.
