Aunque aún no ha comenzado oficialmente el proceso de aceptación de la oferta para fusionarse con el Banco Sabadell, BBVA ya está trabajando con fuerza en los preparativos. La entidad ha dado un paso importante al dividir su oficina de integración en cinco áreas especializadas, con el objetivo de acelerar y facilitar la unión de ambas entidades.
Estas cinco divisiones se encargan de temas muy concretos: la integración del negocio, de la tecnología, de las operaciones, del área financiera y de los recursos humanos. Cada una tiene un responsable con experiencia dentro del banco, todos bajo la dirección de Jordi García Bosch, persona de confianza del presidente Carlos Torres. Esta estrategia busca que un grupo específico de trabajadores esté completamente enfocado en hacer que la fusión sea rápida y ordenada.
En vez de buscar nuevos fichajes externos, BBVA ha apostado por utilizar el talento interno. Por ejemplo, Antonio Viejo Bermejo lidera el área tecnológica y Rafael Pintado García está al frente de la integración del negocio.
Uno de los objetivos principales de esta oficina es recopilar toda la información necesaria para entender a fondo las cuentas y el funcionamiento de Sabadell. Esta información será clave para tomar decisiones acertadas durante el proceso. Además, BBVA está en contacto con otras empresas externas que le ayudan a tener datos más detallados y fiables sobre su futuro socio.
Según los planes del banco, si todo va como se espera, la integración de Sabadell podría cerrarse entre seis y ocho meses después de llegar a un acuerdo con su consejo de administración. Eso significaría que la unión definitiva podría estar lista en la primavera del próximo año.
Para asegurar que todo marche según lo previsto, BBVA también cuenta con el apoyo de varias firmas expertas en grandes operaciones. Deloitte trabaja directamente con la oficina de integración, y otros grandes nombres como JPMorgan, Rothschild, UBS, Mediobanca y el despacho de abogados Garrigues están también involucrados como asesores.
Con esta organización y apoyo, BBVA busca estar preparado para cuando la fusión sea oficial, y lograr una transición fluida que fortalezca su posición en el mercado bancario español.