1. Ten un plan diario y síguelo a rajatabla
Establece una agenda de búsqueda de empleo y no te la saltes. Dedica unas horas al día a consultar ofertas, a mejorar tu currículum y mandarlo… Intenta hacer esto de lunes a viernes como si la búsqueda fuese un trabajo en sí mismo.
2. Red de contactos: profesores, amigos, familiares…
Puedes preguntar a tus profesores por contactos que puedan darte, ya que se mueven en tu mismo sector. Intenta crear una red de contactos (poco a poco), mantenerla y cuidarla. La agenda laboral es realmente importante.
3. Utiliza las redes sociales como herramienta
Es un buen momento para hacerte un perfil profesional en LinkedIn, crear un blog, moverte (en sentido laboral) por las redes sociales… ahí puedes encontrar la oportunidad que esperabas.
4. Tu formación no tiene por qué acabar ahí
Sigue formándote: haz un máster, un curso, mejora los idiomas… hacer cualquiera de éstas cosas te mantendrá activo durante tu búsqueda de empleo a la vez que perfeccionas y haces más atractivo tu currículum.
5. ¡No te desanimes!
Es fundamental si quieres encontrar un empleo: no perder la ilusión ni las ganas. A veces es complicado mantener el ánimo, pero la actitud que tenemos frente a las circunstancias es la base de nuestros resultados.