1. Si la situación con algún cliente se encuentra estancada o mal, es hora de sacar sus puntos fuertes.
Usa las victorias más importantes que hayas conseguido para demostrar con hechos que eres la mejor opción, demuestra que puedes sacar adelante ese proyecto.
2. Cuando la empresa está en proceso de cambio, hay que distinguir entre los procesos negativos y los positivos.
Cuando el futuro de la empresa es incierto por problemas, es un pésimo momento para tratar con los negociadores. Si se trata de un proceso de fusión o reorganización es el momento adecuado. Tal vez tu solicitud sea clave para el proceso que atraviesa la empresa.
3. Cuando tu departamento o empresa ha conseguido una victoria.
Puedes utilizar tu participación en dicha victoria para conseguir tu solicitud. Demuestra la importancia de tu contribución en el proceso.
4. Si has hecho extras.
Hacer cosas que el resto no hace o no quiere hacer te posicionara de forma única. Ya sea haciendo el viaje o la reunión que nadie quiere o acudiendo el fin de semana. Estas acciones resaltarán muchas de tus cualidades.
5. Después de un no.
Muchas personas dejan de intentarlo cuando reciben una negativa como respuesta. No seas de esos ya que las posibilidades de un si aumentan con cada rechazo. Cuando lo vuelves a solicitar recalca que ya te han rechazado en varias ocasiones y que crees que este es el momento adecuado para un sí.