1. ¿Qué crees que puedes aportar a la empresa?
Con esta pregunta los empresarios quieren ver si eres una persona que se adapta al perfil de la compañía. Es tu momento para destacar cuáles son tus habilidades y enfocarlas a las objetivos de la empresa. Destaca tus logros y todas las ideas que podrían ser de gran utilidad para el crecimiento del negocio.
2. ¿Por qué estás interesado en este trabajo?
Hay muchos candidatos que solicitan un puesto de trabajo sin más y eso, se nota a la hora de responder a esta pregunta. La estrategia para salir airoso es destacar la gran importancia de la empresa y y el interés que tienes por formar parte de un equipo como el suyo. Quieren a personas ilusionadas y que se vayan a implicar en los futuros proyectos.
3. ¿Cuál es tu principal defecto?
Puede ser una pregunta trampa así que, ten cuidado con lo que desvelas. Está bien que te muestres crítico porque lo que quieren saber es si tienes capacidad de asimilar tus errores. Suele ser difícil responderla así que, prepáratela. El consejo es decirlo todo de forma positiva y no revelar nada que pueda afectar al trabajo.
4. ¿Por qué crees que debes ser el elegido?
Aquí es donde tienes que usar todo tu potencial para convencer al reclutador. No te ciñas a los convencionalismos e intenta que tu respuesta sea original y marque la diferencia. Puedes resaltar toda la experiencia que tienes y tu capacidad para adaptarte. Sobre todo, muestra seguridad en lo que dices y confianza al hablar de tu persona.
5. ¿Dónde te ves dentro de diez años?
Lo único que intentan con esta pregunta es ver si eres una persona que tiene aspiraciones en la vida. Quieren contratar a alguien que tenga metas y sea activa en su búsqueda para alcanzarlas. Deja claro que quieres crecer profesionalmente y que eres una persona ambiciosa que no se da por vencida fácilmente.