En un mundo tan globalizado como en el que vivimos y con unos avances tecnológicos que se producen casi a la velocidad de la luz, hemos visto cómo cada día más funciones que a lo largo de la historia han sido realizadas de manera manual por el hombre, se han automatizado y ahora es una máquina quien las realiza, aunque siempre bajo la supervisión y el criterio programador de un humanos.

Aunque no podemos negar que con cada avance tecnológico en lo referido al trabajo ganamos en calidad de vida, también supone un cierto temor, y algunas dudas como hasta dónde una máquina puede sustituir a un humano nos empiezan a rondar la cabeza. Robots, drones, ciudades inteligentes, medicina… todos estos avances forman parte de una evolución tecnológica natural, que aunque es innegable que muchas veces supone la desaparición de ciertos empleos, también ha favorecido el nacimiento de otro más especializados.

La Inteligencia Artificial viene para mejorar los procesos de todos los mercados y que de este modo, los humanos se puedan dedicar al trabajo creativo que los ordenadores son incapaces de realizar ya que carecen de la capacidad humana, es decir, tienen una “inteligencia” limitada.

Aunque la llegada de la tecnología a todos los sectores es un hecho, no avanza de igual manera en cada ámbito. Por ello se pretende reducir la brecha tecnológica cambiando las políticas que lo regulan en cada lugar del mundo. Según Jordi Torras, CEO y Fundador de Inbenta, “la Inteligencia Artificial ha estado aquí durante un largo tiempo y vamos a ver un gran progreso en muchas áreas, asistentes en los hogares, realidad virtual, automóviles sin conductor, chatbots que resuelven nuestras dudas… de cualquier manera, todo evolucionará. Existe cierta exageración y cobertura excesiva sobre el asunto, ya que siempre se trata de lo que está de moda, sin embargo, gracias al progreso que tendrá en los próximos años, tarde o temprano el mismo concepto de IA comenzará a sonar obsoleto dado que estará totalmente integrado en nuestro día a día. En conclusión, debemos fusionarnos con la Inteligencia Artificial para verla como lo que realmente es, un punto de apoyo para trabajar en equipo, no un enemigo”.